Es difícil que un ganador de Eurovisión venda singles de manera internacional, apenas Loreen logró lo que Lena o Helena Paparizou no consiguieron del todo. Pero incluso Loreen pudo averiguar que la victoria en el certamen o un single millonario en ventas no garantizaba un disco entero exitoso. El formato «álbum» rara vez se coloca en el mercado tras Eurovisión. Por eso es un fenómeno sin precedentes lo que está sucediendo con The Common Linnets: sin haber ganado siquiera el Festival (quedaron segundos) y mientras Conchita Wurst prepara su álbum para cuando ya sólo los fans de Lady Gaga la recuerden, el disco del dúo sí ha logrado colocarse en el top 40 en Reino Unido -donde ‘Heal‘ de Loreen sólo llegó al puesto 71-, en el top 20 alemán, en el top 50 español y por supuesto en el top 1 holandés, con disco de platino bajo el brazo.
¿Qué ha propiciado todo esto? Hay algo más allá de su disposición digital en iTunes en el momento adecuado. Mientras nadie sabe qué se puede esperar de un disco de música pop improvisado tras la victoria en un certamen de esta envergadura (cuánta cantidad de dubstep, fillers con sonidos pasados de moda, versiones o baladas pueden caber), estaba claro qué encontraríamos en el primer disco del dúo formado por Ilse DeLange y Waylon (como todo el mundo sabía qué encontraría en el correspondiente CD de Lordi). Aquí lo único improvisado parece la fea portada. Por lo demás, evidentemente ambos van detrás del sonido de otros dúos del tipo Robert Plant y Alison Krauss, Johnny Cash y June Carter o más recientemente She & Him, y eso se refleja en este disco, homónimo y producido por el también holandés JB Meijers, en el que no faltan banjos ni botas de cowboy.
Aunque la voz de Waylon es un buen contraste para la de Ilse, ella es quien ya era una estrella multiplatino en Holanda desde finales de los 90, quien ya sabía lo que era grabar con músicos de Nashville y quien tiene más protagonismo en algunos de los momentos más bonitos de este disco, como ‘Before Complete Surrender’, ‘Give Me a Reason’ o ‘Love Goes On’, dedicada a su padre. Son canciones de amor a menudo amables de más -en sus momentos más rockeros la referencia parecen más Matchbox 20 que Fleetwood Mac-, pero en general correctas con referencias tan apetecibles como Carole King o incluso The Carpenters. No volvemos a encontrar la interesante impronta de Police en todo esto como en el sencillo ‘Calm After The Storm’, cuya puesta en escena con una química perfecta entre ambos será difícil de olvidar, pero la buena noticia es que el resto de su repertorio no ha quedado tampoco a años luz.
Calificación: 6/10
Lo mejor: ‘Calm After the Storm’, ‘Before Complete Surrender’, ‘Love Goes On’
Te gustará si te gustan: Robert Plant and Alison Krauss, Carole King
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