Después de estar 20 minutos en la cola equivocada, pude entrar en la Sala Cruzcampo a tiempo de ver a Alaska recogiendo el disco de oro por ‘El Extraño Viaje’, del que todos, como no puede ser de otra forma, nos alegramos muchísimo. Nacho no estaba. Alaska, muy amable, agradeció a Dro su apoyo tras calificarla como «compañía independiente». Mientras me acordaba de algunos de sus compañeros de compañía independiente, Fran Perea o Santa Justa Klan, rezaba todo lo que me sabía para que por favor me gustara el espectáculo. Que es muy feo ir invitado a un sitio al que mucha gente habría pagado por ir, y encima ponerlo mal.
Nancys Rubias: El grupo del marido de Alaska sigue adelante para nuestro asombro. El año que viene publica segundo disco y anoche presentó algunas de sus nuevas canciones: ‘Nancy Ramone’, ‘Haciendo majaradas’, una sobre la televisión que cita series y programas sobre todo de los 80 y otra que no recuerdo. Hubo gente que estaba encantada y hubo gente que no lo podía soportar y se salió a cenar. Hubo de las dos cosas. Yo ni aplaudí ni me salí a cenar, me quedé para darle al grupo la última oportunidad. Para mí las Nancys funcionaron un poquito en el Orgullo de 2004, como simple curiosidad. Pero contar tantas veces el mismo chiste hace que te replantees si el chiste era bueno o no. Y desde luego es bastante malo. El grupo sigue haciendo playback, pero un playback sin mucha gracia: ni las Nancys se mueven por el escenario, ni simulan una miserable cejilla, ni un miserable Mi menor. Mario cantando en directo encima de su voz en playback es el colmo del sinsentido. ¿Son irónicas o no? Es inevitable: cuanta más música escuchas en la vida, menos gracia tienen las Nancys Absurdas. 0.
Miranda! Miranda! es un grupo argentino que no me gusta nada, así que la verdad, iba igual de predispuesto a que su concierto tampoco me gustase. Pero ni en mis peores previsiones pensé que me pudiera gustar tan poco. En Argentina son un grupo que arrastra masas y aquí Dro los está promocionando con vistas a conquistar principalmente al público gay. El cantante parece ser que es hetero, misterios de la vida, pero tiene un tipo de pluma muy similar a Jake Shears. Se moja los dedos con la lengua y se peina las cejas todo el rato. Definitivamente tienen algo que resulta demasiado gay incluso para mí. Podrían ser los disfraces yeyé, la lentejuela, el verde que vistieron todos o esa sombra de ojos del guitarrista, pero al final, más que modernos, me recordaron a Andrea del Boca en ‘Antonella’ disfrazada de payaso 15 años atrás. Todo daría igual si tuvieran las canciones, pero por alguna razón, posiblemente el modo de acelerar las frases, me ponen muy nervioso. A su favor, la cantidad de fans que había y lo corto del repertorio, encabezado por su mejor canción, ‘Yo te diré’. 2.
Fangoria: La gran noticia, excelente, es que con Fangoria ya no sale a tocar ninguno de los dos baterías que convertían tema sí, tema también, cualquier canción en ‘El Rey León’. ¡Qué descanso! Repito: ¡qué descanso! Por lo demás, una vez asumido que Fangoria es el grupo con peor sonido en directo de los cientos de grupos que he visto actuando, esta vez el directo no fue tan catastrófico como otras ocasiones. ¡Y Alaska sólo se equivocó en las letras 5 ó 6 veces!
El concierto se divide en dos: la parte blanca, con todos vestidos de blanco, y la parte negra, con todos vestidos de negro. Es una estupidez, pero la estupidez saca casi todo el partido posible a lo limitado de la Sala Águila Amstel. Por lo demás, un buen concierto compuesto principalmente por los temas más cañeros del nuevo disco, los éxitos recientes ‘No sé qué me das’, ‘Eternamente inocente’, ‘Retorciendo palabras’, ‘Miro la vida pasar’ y ‘La mano en el fuego’ y dos sorpresas: ‘Rey del glam’, a modo de fiesta final con las Nancys y Miranda!, y una, por desgracia, muy fríamente acogida, gran ‘Descongélate’.
Temas como ‘El cementerio de mis sueños’ o ‘Mis plegarias atendidas’ mostraron la solidez de este nuevo disco. No sonaron mis favoritas (‘A fuerza de vivir’, ‘Nada más que añadir’) y no me aburrí: por algo será. Incluso le estoy cogiendo el punto a ‘Si lo sabe Dios que se entere todo el mundo’, desde que se rumorea que Miguel Sebastián confesará que es gay próximamente en El País Semanal. ¿Lo mejor? Lo que presentaron como «los 15 minutos de bakalao» (‘Estés donde estés’, ‘NSQMD’ y ‘Retorciendo palabras’ en remezcla de Les Germanetes Gilda), que sirvieron para recordar lo buenísima canción que es ‘Retorciendo palabras’ en cualquiera de sus formatos. 6.
La Terremoto de Alcorcón: La Terremoto salió para confirmarnos, una vez más, la diferencia entre artista y mamarracha, entre humor y ridículo, entre sal y sosez. No faltaron sus aclamadas versiones de Beyoncé y Madonna ni sus «Viva el Emule» ni la esperada dedicatoria a Pepón Nieto, más que posiblemente presente, del ‘It’s raining men’. 6.
Para los que se han quedado con ganas de más, el próximo 5 de enero, Noche de Reyes, Fangoria con las Nancys Absurdas, Pastora y Pet Shop Boys, tocarán en el Palacio de los Deportes. Las entradas saldrán a la venta el 1 de diciembre en los puntos habituales (Ticktackticket, Fnac, etc), pero tranquilos que seguro que no se agotarán.