El pasado domingo en Los Angeles falleció Doug Fieger, cantante de The Knack, a los 57 años a causa de un cáncer. Si este nombre no te dice nada, añadiremos que fue cantante y guitarrista de The Knack. Si este nombre no te dice nada, añadiremos que es la banda que escribió y popularizó ‘My Sharona’. Ahora sí, ¿no? En 1979, cuando el mundo estaba dominado por los Bee-Gees y la música disco, esta canción permaneció como número 1 de singles de Billboard nada menos que seis semanas, pero eso es solo un dato. Lo importante es que ‘My Sharona’ es una canción que, como ‘Yesterday’, ‘Satisfaction’ o ‘Macarena’, trasciende los límites de la música pop para convertirse en un icono reconocible por casi cualquier habitante del globo terráqueo. Se sabe, de hecho, que es una de las canciones que George W. Bush llevaba en su iPod presidencial.

Doug conoció a Sharona Alperin (que es la misma chica que aparece en la portada del 7″) cuando ella tenía 17 años y, no solo se enamoró instantáneamente, sino que le inspiró para escribir decenas de canciones, entre las que se encontraban las del magnífico debut de The Knack, ‘Get The Knack’, que también alcanzó el número 1 de álbumes en aquel año. Pero nunca volvieron a lograr un éxito siquiera cercano al de ‘My Sharona’ porque una canción así, que nunca ha dejado ni dejará de sonar en bares, clubes y fiestas de cualquier rincón del mundo, marca una carrera musical para bien y para mal. Su memorable riff, su indeleble gancho melódico, su puente final con el genial solo de Berton Averre son catecismo para bandas de hoy día como Kaiser Chiefs o The Fratellis. Incluso durante estos últimos seis años de lucha contra un cáncer de pulmón y un tumor cerebral, Fieger seguía tocándola en los escenarios. Fieger seguirá vivo siempre en ‘My Sharona’.