‘Grown Ocean’, el veredicto

-

- Publicidad -

‘Grown Ocean’, el veredicto

«A pesar de las relativamente buenas críticas que ha despertado el tema, lo cierto es que no entra a la primera como sí lo hace el que da título al álbum, ‘Helplessness Blues’. De todas formas, he de reconocer momentos gratificantes al escuchar instrumentos controlados al milímetro, ofreciendo una perfecta armonía onírica de añoranza sesentera. Fleet Foxes parecen comprometerse con inspiraciones sonoras y repiten fórmula en este segundo álbum, cosa que no desagrada. Si funcionó una vez y a todo el mundo le gustó, ¿por qué no repetir?». Judith.


«Con una producción prácticamente idéntica a la de su primer álbum, se han ido presentado los nuevos temas de Fleet Foxes. Un sonido tan característico es muy difícil de conseguir y ellos lo han hecho con tan solo un disco. En el caso de ‘Grown Ocean’, sin embargo, se percibe que todo eso no quiere decir inmovilismo: dan un paso más en su estilo con un tema que derrocha energía por los cuatro costados y que te resulta difícil no escuchar con una sonrisa. Los coros etéreos y la instrumentación limpia sigue ahí, y ahora se añaden detalles, como unas flautas que recuerdan mucho a los mejores The Polyphonic Spree, consiguiendo una sensación casi orquestal con tan poco elementos. No soy su mayor fan, pero hay que reconocer que estos chavales transmiten algo especial». merridew.

- Publicidad -

«El álbum de debut de Fleet Foxes me dejó tan boquiabierto que mis expectativas respecto al siguiente trabajo de la banda eran muy altas, tal vez demasiado. ‘Grown Ocean’ es un tema precioso, muy en la línea de lo que venían haciendo. Con sucesivas escuchas se te va quedando más y más y empiezas a olvidarte de las expectativas y te dedicas a disfrutar, que es lo que vale al fin y al cabo. Aunque sea más de lo mismo, mantienen el nivel, que no es poco». quietmansmiling.

«Fleet Foxes plantan cara al marrón de tener que superar una canción tan grande desde la primera escucha como la hermosísima ‘White Winter Hymnal’ de la única manera que se puede: con un tema que cuenta con un gancho claro (en este caso la percusión casi desde el segundo cero) y cierto desarrollo «in crescendo» (sobre todo en los coros) que hace cada estribillo más emocionante que el anterior. No iguala sus ya clásicos… pero así se hace un «grower»». Sebas.

- Publicidad -

«Sin ser legado de nada y aglutinando 60 y 70 con gran intensidad, consiguen en poco más de cuatro minutos una atmósfera elegante, serena y que anticipa que segundas partes también pueden ser buenas. Genial». Sr John.

Lo más visto

No te pierdas