Cuando esta mañana el Instituto del Cine del Ministerio de Cultura ha anunciado el ganador del Premio Nacional de Cinematografía 2011, la noticia ha pillado a muchos de improviso. La estadística dice que el vencedor de los Goya jamás se hace con este galardón, por lo que las quinielas apuntaban más hacia Icíar Bollaín que hacia Agustí Villaronga, que es realmente quien se lo ha llevado, en parte gracias a su película ‘Pa Negre’.
El filme bien podría haber pasado desapercibido en la cartelera española si no hubiese sido gracias al boca a boca, ese fenómeno tan difícil de conseguir de forma artificial, pero tan beneficioso cuando surge de forma espontánea. Pocos podían predecir el exitazo de ‘Pa Negre’ sobre el papel, y más debido a parte de su trama, que aborda una temática (la de la guerra civil) muy denostada en nuestro país. Sin embargo, las críticas positivas que despertó el largometraje tras su decepcionante (a nivel premios) paso por el Festival de San Sebastián y todo el revuelo mediático generado gracias a su triunfo en los premios Goya han conseguido que pocos españoles se hayan quedado sin verla.