“Qué buen título”. Esto fue lo que pensé de ‘El mundo sin las personas que lo afean y lo arruinan’ (Mondadori, 2010), el anterior libro de relatos de Patricio Pron. Y lo vuelvo a pensar del último, ‘La vida interior de las plantas de interior’ (Mondadori). ¡Qué buen título! Como explica el propio autor, el nombre viene de una confusión, del recuerdo de un disco de Stevie Wonder llamado ‘The Inner Life Of Plants’ que en realidad se llama ‘The Secret Life of Plants’ y es la banda sonora del documental del mismo nombre basado en un libro pseudo-científico de los 70 que aplicaba la filosofía new age al mundo de la botánica.
Este error casi podría servir como punto de partida para uno más de los relatos que conforman el presente volumen. Y es que el azar es el motor narrativo de muchos de ellos. Los caprichos del destino zarandean a los personajes y las consecuencias condicionan su existencia. Puede ser un accidente, un viaje o el encuentro de algo en un contendor de basura. Ocurre un suceso, y a partir de él la narración se esparce en varias direcciones: rastrea los antecedentes y detalla los resultados.
Los mejores ejemplos de este procedimiento narrativo, que vincula a personajes muy diferentes, son el ‘El cerco’, ‘La explicación’ y, sobre todo, ‘Como una cabeza enloquecida vaciada de su contenido’ (¡otro gran título!). Un extraordinario relato que, en solo seis páginas y yendo hacia atrás en el tiempo, sigue el rastro de una peluca desde que la encuentra un albatros en medio del Atlántico hasta su origen: un caballo prehistórico que se convertirá en combustible fósil.
También destacan los relatos protagonizados por escritores o aspirantes a serlo. ‘Un jodido día perfecto sobre la tierra’, ‘Diez mil hombres’, ‘Trofeos de amantes que han partido’ o ‘Algunas palabras sobre el ciclo vital de la ranas’ son cuentos que le permiten al autor reflexionar sobre la (meta)literatura: ironizar sobre los concursos literarios, meditar sobre las relaciones entre las ficciones y los lectores que las hacen suyas, satirizar la critica literaria bloguera y el anonimato de internet, y fabular acerca del oficio de escritor.
En total son trece relatos, la mayoría notables (los centrados en el porno, ‘El nuevo orden’ y ‘La cosecha’, me parecen los más flojos), escritos en una prosa ágil y muy precisa, de esas que te atrapan en dos frases. Comparado por muchos con los de Bolaño, los cuentos de ‘La vida interior de las plantas de interior’ destacan por el ingenio, la emotividad y la sutil ironía que desprenden. Historias sobre personajes solitarios que, sin embargo, hablan de la inevitable naturaleza social de nuestra existencia. 7,5.