Finalmente, Eurovisión ha rectificado la prohibición de exhibir la ikurriña durante el certamen. El País asegura que su portavoz, Dave Goodman, se ha disculpado por el veto y ha asegurado que rectificarán. Goodman ha indicado a través de un comunicado que «la European Broadcaster Union (EBU) quiere asegurarse que el Festival de Eurovisión no se use para hacer declaraciones políticas, mensajes comerciales no autorizados y comentarios ofensivos».
Recordamos que Eurovisión, que se celebra en Estocolmo el próximo 14 de mayo, se ha metido en un jardín con el Gobierno de España tras incluir en su lista de banderas prohibidas la ikurriña (la bandera vasca) junto a otras como la bandera del Estado Islámico. Esta decisión ha instado al ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, a exigir una «rectificación urgente» por parte del festival en solución a este asunto, que finalmente se ha materializado, como indica El País, aunque no hecho pública, al menos por ahora.
Además de las declaraciones de García-Margallo en protesta por esta decisión, tampoco se han hecho esperar en las redes sociales las del lehendakari Iñigo Urkullu, que ha pedido a la embajada de Suecia en España y a RTVE, miembro de Eurovisión, la retirada de la ikurriña de la lista de banderas vetadas por el festival. Urkullu ha escrito que su inclusión en dicha lista «no es de recibo» y ha llegado a sugerir, en una entrevista con Radio Nacional de España, que España debería contemplar su retirada del concurso de no recibir rectificación por parte de Eurovisión.
La ikurriña es una de las varias banderas «locales, regionales o provinciales» que Eurovisión veta en su festival por su carácter político. Junto a esta y la de ISIS también están vetadas las banderas de Málaga, Asturias, Helsinki, Kosovo, Nagorno-Karabaj, Crimea, Palestina, la República Popular de Donestsk, Chipre del Norte y Transnistria, entre otras.
.@Gob_eus va a pedir a @EmbajadorSuecia y a @rtve la retirada de la #Ikurriña de la lista de banderas vetadas por @Eurovision.
— Iñigo Urkullu (@iurkullu) April 29, 2016
Su inclusión, junto a la bandera del DAESH, aunque solo sea a modo de ejemplo, no es de recibo.
— Iñigo Urkullu (@iurkullu) April 29, 2016