Parquet Courts han revitalizado un estilo de punk-rock heredero de la Velvet Underground, el CBGB y los Modern Lovers, pero añadiendo un espíritu noventero en sus melodías, a lo Pavement. Que unas automáticamente en tu cabeza su estilo al de estos nombres puede dar la impresión de que son poco más que un revival pero, tras tres discos bien recibidos por la crítica, están demostrando que lo suyo va en serio y no es flor de un día.
La irrupción del grupo de Brooklyn en el panorama musical de la última década es similar, salvando las distancias en cuanto a repercusión, a la de The Strokes diez años atrás. No solo por referencias (la Velvet) sino por la búsqueda de un sonido clásico que compañeros de generación como Wavves o Ty Segall han preferido subvertir. Quizá sea la diferencia entre vivir en Nueva York o en la costa oeste. La música de Parquet Courts, sobre todo a partir de su segundo álbum, ‘Sunbathing Animal’ (2014), es un ejercicio de contundente actitud sin necesidad de llenar embotar la cabeza del público. Para ello ya sacaron un disco (‘Content Nausea’, de 2014) bajo seudónimo, Parkay Quarts, que dejaba clara la autoría sin «manchar» la carrera discográfica del proyecto principal.
Y es que, aunque los referentes hagan pensar en lo contrario, los trabajos de esta banda se notan bien pensados, y ‘Human performance’ es la mejor muestra de ello. Sus catorce cortes intentan mantener un equilibrio entre temas sencillos y directos y otros más elaborados, entre líneas tarareables y casi recitados, entre momentos improvisados y complejidad.
Así, un cañón como ‘Dust’ se complementa con el sentimentalismo de ‘Keep It Even’ (en ambas, por cierto, toca Jeff Tweedy -no en vano el citado ‘Content Nausea’ estaba entre los favoritos recientes de Wilco-); la claridad musical de ‘Berlin Got Blurry’, que podría haber cantado Joe Strummer, alivia la melodía torcida de ‘Human Performance’ y su estribillo puramente noventero; la dureza casi no-wave de ‘I Was Just Here’ lanza la mano hacia el clasicismo punk de ‘Pathos Prairie’, otro tema con aires a The Clash. Y, en mitad del álbum, la sesión de improvisación de ‘One Man, No City’, un spoken word con bongos y un solo de ruido guitarrero.
‘Human performance’ supera la prueba del tercer disco, con el plus de reconocer el estilo de la banda más allá de las influencias: lo mejor que se puede decir de un grupo es que suenan a ellos mismos. Es lo que ocurre al escuchar ‘Already Dead’ o ‘Paraphrased’. Además, se muestran más sólidos: ‘Light Up Gold’ y ‘Sunbathing Animal’ llegaban a resultar intrascendentes en algunos momentos. Aquí, sin embargo, mantienen el ritmo a pesar de no reducir el número de cortes, bastante elevado para los estándares actuales.
El entusiasmo disminuye al empezar a echar de menos algo de riesgo, algo que les lance más allá de una categoría y apueste hacia elevar su nombre en los carteles de los festivales. Parquet Courts se disfruta, mucho. Se han atrevido a bajar de revoluciones su música para profundizar en ella, lo que ya es un primer paso. ¿Pueden dar más de sí? Estoy completamente seguro.
Parquet Courts actuarán en Primavera Sound 2016.
Calificación: 7/10
Lo mejor: ‘Human Performance’, ‘One Man, No City’, ‘Already Dead’, ‘Berlin Got Blurry’
Te gustará si te gustan: The Velvet Underground, Modern Lovers, Pavement, The Feelies, The Strokes
Escúchalo: Spotify
Cómpralo: Amazon