No queda ni un solo ser vivo en la faz de la tierra por saber del reciente divorcio de Brad Pitt y Angelina Jolie. Y como parece que las estrellas de Hollywood han terminado su relación de mala manera, todo indica que tendremos culebrón para rato. De hecho, la cosa ha adquirido tintes dramáticos, de película que podría dirigir la propia Jolie, de hecho, en las últimas horas. TMZ, que destapó la noticia, aseguraba que la actriz y directora había solicitado la custodia de los seis hijos de la pareja porque no quería que Brad Pitt criara a los niños rodeado de “marihuana, alcohol y su problema de mal humor”. Pero la cuestión no ha quedado en mera maledicencia.
Al parecer, media una denuncia interpuesta contra Pitt por un incidente sucedido en un vuelo de regreso a Los Ángeles desde París el pasado día 14 de septiembre, cuando uno de los hijos de la pareja trató de mediar en una discusión entre sus progenitores. Según la fuente, el actor agredió «física y verbalmente» al niño, con el agravante de que estaba borracho en el momento del incidente. Otras fuentes aseguran que Brad no golpeó a su hijo en ningún momento, pero sí que hubi contacto físico. Dado que sucedió en pleno vuelo, la jurisidicción del caso corresponde al FBI. Un portavoz del cuerpo ha confirmado la investigación, y al parecer el denunciado está colaborando para esclarecer el caso.
Angelina Jolie y Brad Pitt formaban una de las parejas más sólidas del stardom hollywoodiense, una relación que comenzaba hace 14 años, aunque sólo llevaban 2 casados. Por eso, la imagen de ambos juntos era ya indisociable y se les conocía popularmente como Brangelina. De hecho, una de las consecuencias más curiosas de esta separación ha sido la del «divorcio» de sus muñecos de cera en el Museo de Cera de Madrid. Con bastante coña, los operarios del Museo procedieron a situar separadas las figuras de Brangelina que hasta ahora era un tándem. El vídeo que registraba el acto se ha hecho viral.