Solange nos soltó el pasado viernes su nuevo disco sin singles previos ni vídeos ni advertirnos cuáles eran los sencillos extraídos del mismo. Entre esas 21 canciones que forman ‘A Seat at the Table’ (muchas son interludios) las dos que estrenan vídeo son ‘Cranes in the Sky’ y ‘Don’t Touch My Hair’. La primera es la que claramente ha conseguido más escuchas en Spotify desde el primer momento y la segunda es casualmente la que ha sido escogida como “best new track” por Pitchfork.

Los dos vídeos estrenados han sido dirigidos por la propia Solange en compañía de su marido, Alan Ferguson, un director de vídeos que ha trabajado con Katy Perry (‘Hot N Cold’), Janelle Monáe (‘Electric Lady’), su cuñada Beyoncé (‘Party’) y un sinfín de vídeos de Fall Out Boy. ‘Cranes in the Sky’ se sitúa en varios emplazamientos en el desierto mientras que el de ‘Don’t Touch My Hair’ muestra a la cantante realizando coreografías rodeada de bailarines. Este cuenta con la colaboración de Sampha, que ha trabajado con gente tan famosa como Kanye West, Drake, Frank Ocean o Jessie Ware y está a puntito de ser lanzado definitivamente a lo grande y por su cuenta gracias al estupendo single ‘Blood On Me‘.

Ambos vídeos son intercambiables entre sí, se concentran claramente en la fotografía, y resultan de buena factura, aunque por momentos parecen más bien sendos proyectos de moda. No parecen aportar más que esa pátina de elegancia que tanto ha obsesionado a la artista de R&B.