Hoy amanecemos con una noticia que nos entristece más todavía, relacionada con la muerte de la actriz Carrie Fisher hace menos de dos días. Anoche algunos medios divulgaban la noticia de que la madre de Fisher, Debbie Reynolds, había sufrido un infarto cerebral apenas horas después de conocerse el fallecimiento de su hija. Esta mañana se ha confirmado que la también actriz, de 84 años, no superaba esta crisis de salud y también moría. Su especial y difícil relación con su hija fue retratada por esta en la mitad ficción, mitad autobiográfica ‘Postales desde el filo’ (Mike Nichols, 1990).
Aunque no haya dejado de trabajar en el cine y la televisión prácticamente hasta su final, Reynolds quizá no ha gozado del halo de leyenda de otras actrices de su época. Su carrera comenzó a destacar cuando apenas tenía 18 años y protagonizó ‘Tres palabritas’ (Richard Thrope, 1950), una comedia musical sobre la Tin Pan Alley. Su papel más recordado y popular llegaría dos años después, de la mano de Gene Kelly y Stanley Donen en la icónica ‘Cantando bajo la lluvia’, donde interpretaba a la protagonista, Kathy Selden. Un personaje que ya le ha supuesto un lugar en la historia del cine.
Sin embargo, Reynolds no se quedó ahí. Durante los años 50 continuó encandenando papeles protagonistas en films como ‘Tres chicas con suerte’, ‘Tammy, la muchacha salvaje’ o ‘Cómo atrapar un marido’. En esa década también se casó con el entonces popular crooner Eddie Fisher, con el que concibió a sus dos hijos, Carrie y Todd, antes de que se supiera que el cantante le era infiel con su amiga Elizabeth Taylor, en uno de los escándalos más sonados de Hollywod en la época.
Reynolds continuó haciendo filmes con regularidad en la década de los 60, si bien en los 70 y 80 diversificó su actividad en la televisión (de la que fue despedida tras negarse a que su programa estuviera patrocinado por una marca de cigarrillos) y el teatro musical. En los 90 su carrera interpretativa se reactivó con películas como la popular ‘In & Out’ o en series televisivas como ‘Roseanne’ y ‘Will & Grace’. En los últimos años también ejerció de jurado ocasional en el reality ‘RuPaul’s Drag Race‘. Su último papel en el cine fue en la estupenda ‘Behind The Candelabra‘ (Steven Soderbergh, 2013), centrada en la figura de Liberace.
También regentó casinos en Las Vegas y tuvo un museo de cinematografía, reuniendo objetos de gran valor simbólico del Hollywood dorado que por problemas financieros hubo de subastar. Para muchos, como nuestra colaboradora Angèle Leciel, Debbie también destacó por su carrera musical. Como demostró en los muchos filmes musicales y obras de Broadway, era una consumada cantante e incluso alcanzó el número 1 de la lista de singles de EEUU en 1957: ‘Tammy’, tema principal de ‘Tammy, la muchacha salvaje’ estuvo en lo más alto de Billboard durante 5 semanas y fue disco de oro.