Entre las mal llamadas “trap queens” –como han venido repitiendo los teóricos “traperos”, este estilo no tiene que ver con su concepción original–, Bad Gyal, Ms Nina o La Zowi se han hecho ya con un nombre propio y –especialmente la primera– se han ganado la atención y el respeto de la crítica tanto como del público. Pero hay muchas más que están en un segundo plano de popularidad hasta que les llegue su oportunidad. La última que parece dispuesta para dar el salto hacia el lado masivo del pop es Shainny.
Esta madrileña, que en realidad se llama Marta Sánchez, se autodefine como “la niña que brilla” –su nombre es una españolización de “shiny” con una n de más–, y lo cierto es que tiene algo especial cuando, con apenas 3 o 4 temas subidos a Youtube, ya ha conseguido un contrato con Sony. La multinacional ha visto el filón tras el pelotazo de ‘Mala mujer’ de C. Tangana y parece dispuesto a seguir apostando por el nuevo pop urbano nacional.
Como decía, Shainny comenzó el pasado año a subir temas como ‘Mi papi’, ‘Veneno’, ‘Me lo pide a mí’ –apropiación de ‘Pree Me’ de Akeem Everix– o ‘Bailando’ –todos los beats, salvo el primero que es de Jack Red, están a cargo de V.padrino–. Canciones que en principio no parecen ir por delante de compañeras como Blondie, por ejemplo, a medio camino del pop, el neo-dancehall, la electrónica y el R&B. Sin embargo, un par de escuchas hacen evidentes que su flow y sus ganchos tienen algo especial, que se pegan a la mente de forma totalmente inevitable. Bad Gyal puede ser uno de sus referentes –de hecho, ha abierto para ella un reciente bolo en Sevilla–, si bien Shainny parece orientada a un plano más comercial.
‘Me amas’, su primer single para la multi, estrenado hace una semana, está producido por Los Del Control, el tándem habitual de Kaydy Cain –autores, por ejemplo, de la adictiva bachata ‘Si me meten preso’–. Y vuelve a mostrar en él esas mismas virtudes, con un acabado aún mejor. Parece fuera de duda que, en u momento en el que ‘Lo malo’ de Aitana War es número 1 de las listas de singles, una buena promoción y un buen respaldo artístico podrían hacer de Shainny una estrella del pop.