Demi Lovato ha publicado sus primeras declaraciones tras ser ingresada la semana pasada en un hospital de Los Ángeles debido a una sobredosis. La cantante apunta que tras el incidente ha aprendido que la adicción no es una enfermedad que “desaparezca con el tiempo” sino que su tratamiento es constante, y agradece a sus familia, a sus fans, a su equipo y al personal médico del hospital el apoyo recibido en la última semana.
Estas son sus palabras: “Siempre he sido sincera en relación a mi experiencia con la adicción. Lo que he aprendido es que esta enfermedad no es algo que desaparezca o se diluya con el tiempo. Es algo que debo seguir superando y todavía no lo he hecho. Agradezco a Dios por mantenerme viva y en buena salud. A mis fans, os estoy eternamente agradecida por todo el amor y el apoyo que he recibido esta última semana, y siempre. Vuestros pensamientos positivos y plegarias me han ayudado a navegar estos difíciles momentos. Quiero agradecer a mi familia, a mi equipo y al personal de Cedars-Sinai, quienes han estado a mi lado durante todo este tiempo. Sin ellos no estaría aquí escribiendo esta carta para vosotros. Ahora necesito tiempo para sanarme y concentrarme en mi sobriedad y en mi camino hacia la recuperación. Nunca olvidaré el amor que todos vosotros me habéis mostrado, y espero con ansia el día que pueda decir que he visto la luz al final del túnel. Seguiré luchando”.