Travis Scott y Kid Cudi han formado un dúo llamado The Scotts que ha posicionado su tema de presentación, ‘The Scotts’, en el número 1 global de Spotify de manera instantánea. Parte de la redacción lo evalúa.
«Travis Scott ha querido montarse un grupillo con Kid Cudi para demostrarle su admiración después de varias colaboraciones conjuntas que hemos venido viendo desde sus respectivos discos de 2016 (Kid Cudi también aparecía en ‘Astroworld’ en 2018). El tema, promocionado junto a Fortnite, presentaba una base random a más no poder, primero ofreciendo una estrofa de uno y luego la del otro, sin mayor aparente comedura de tarro… Pero de repente esa outro instrumental te hace cambiar de opinión. Entre sonidos prog y cósmicos, uno no sabe si suena un featuring de Daft Punk o un homenaje a la 5ª sinfonía de Beethoven». Sebas E. Alonso
«El single conjunto de Travis Scott y Kid Cudi, quien en realidad se llama Scott -de ahí el nombre del grupo-, está a punto de darles a los dos raperos un nuevo número 1 en el chart americano. ‘THE SCOTTS’ vuelve a hipnotizar como solo sabe hacerlo la música de Travis Scott gracias a una base letárgica y levemente radioactiva sobre la que cada rapero aporta su personal flow bañado en autotune (obvio). El segmento cósmico final, por inesperado, resulta la mejor parte de la canción, pero además está cargado de una gran intriga. Si es la primera pista de un nuevo disco conjunto de Travis Scott y Kid Cudi, y tiene toda la pinta de que lo es porque la canción empieza anunciando la llegada de THE SCOTTS y suena a intro desde el primer segundo al último, ya tengo ganas de escuchar lo siguiente». Jordi Bardají.
«De primeras esta ‘The SCOTTS’ me pareció una nadería trap. Y lo cierto es que parece algo perezoso: dos versos, uno de Travis y otro de Cudi –lo de «Scotts» viene del apellido del primero y del nombre propio del segundo– en el que alertan de la llegada de la «madera» para mover un escondite, fiel al estilo de vida que marca el subgénero en cuestión. Classic trap. Sin embargo, ‘The SCOTTS’ tiene algo especial, como casi todo lo que toca Travis por predecible que parezca: su base es una auténtica pasada gracias a los detalles de esas ¿guitarras? –que bien podrían haberse extraído de un tema de Beach House, por ejemplo– y a esa coda de sintetizadores a lo Jean-Michel Jarre o Mike Oldfield, sublimando ese gancho vocal al que tanto partido sacan The Scotts, el túetano de la canción. Sin duda, Travis está muy por delante de la nutrida competencia en el trap, y la metáfora de una especie de Dios cósmico a su imagen y semejanza dando un concierto virtual en el corazón del videojuego ‘Fortnite’ no podía ser más significativa». Raúl Guillén.