Parte de la redacción evalúa ‘Dynamite’ de BTS, que ya es número 1 en el Billboard Hot 100.
«BTS y el K-pop reinan esta semana en EEUU. Ojalá reinaran también los fans del K-pop en EEUU, no sólo en sentido figurado. En tiempos convulsos, este ‘Dynamite’ buenrollero, puede actuar como un bálsamo. ‘Dynamite’ es un disco funk sencillo y domesticado, con reminiscencias setenteras y brillo ochentero, como pasado por el filtro Daft Punk lo justo para darle un puntito arrebatador. Es fácil y pegadizo, sus vientos y su estribillo son resultones y pegadizos; la mayor pega que le pongo es el cierre de la canción; ese final de redoble cutre sincopado que acaba en seco da mucha grima auditiva. Quitando eso, ‘Dynamite’ no vuela cabezas… pero se pega cosa mala». Mireia Pería.
«‘Dynamite’ cuenta con varios ingredientes habituales en la canción pop hedonista perfecta, la que funciona porque le gusta a todo el mundo y a la que le importa entre cero y nada lo que diga la crítica. Recuerda a varios de los hits de Maroon 5, o a algo tipo ‘Cake by the Ocean’, el «grower» de DNCE. La de BTS cita a los Rolling Stones, comienza por el estribillo, introduce palabras como «ding dong» y «ping pong»… Tiene su gracia. Pero juega todas sus cartas demasiado pronto, de manera que su segunda parte se desmorona: si el tarareo «dyn-na-na-na, na-na-na-na-na, na-na-na, life is dynamite» es un «eye rolling», aguarda a que llegue su subida de medio tono final». Sebas E. Alonso.
«Es un fenómeno digno de estudio que la calidad de la música de BTS nunca haya alcanzado la altura de su fama global. Es maravilloso que una banda surcoreana arrase en el mundo entero, y de hecho el futuro de la música es el de la globalización, pero la música de BTS es de una mediocridad difícil de creer, como ha quedado demostrado con la escucha de sus interminables discos, resultado de copiar fórmulas de éxito sin nada interesante o nuevo que aportar más allá del lenguaje, y haciendo uso de las melodías y producciones más insulsas imaginables. ‘Dynamite’ no es en absoluto «la bomba» como los seguidores de la banda están comentando en redes: el tema no es más que un sucedáneo de ‘Say So’ de Doja Cat que además hace sonar ‘Can’t Stop the Feeling!‘ de Justin Timberlake como una obra maestra. Básicamente, es un tema de disco-funk facilón, insulso y forzado que en absoluto merece ser número uno en ningún sitio. Sus dos co-autores, David Stewart (no, no es el integrante de Eurythmics) y Jessica Agombar (no, no es un nuevo alias de Taylor Swift) han firmado juntos temas como ‘What A Man Gotta Do’ de Jonas Brothers o ‘I Love You’s’ de Hailee Stanfield, pero ‘Dynamite’ no es un hito artístico para ellos precisamente. Enhorabuena por el éxito, eso sí». Jordi Bardají