Justin Timberlake ha sido noticia en los últimos días por un comunicado realizado a través de Instagram hijo de la polémica que ha generado el documental de New York Times sobre Britney Spears. Tales palabras se pronuncian en un momento estratégico para el artista, que debe de estar ultimando su regreso. Cuestionado a través de citas y mensajes, Timberlake ha decidido coger el toro por los cuernos y escribir un largo mensaje en Instagram que dice lo siguiente: “Siento profundamente la de veces en mi vida en que mis acciones han contribuido al problema, hablando cuando no me correspondía o no hablando en favor de lo correcto”.
Va más allá para autocondenarse: “Entiendo que me quedé corto en algunos momentos y en otros me beneficié de un sistema que condona la misoginia y el racismo”. Sin irse por las ramas, continúa: “Específicamente quiero disculparme con Britney Spears y Janet Jackson de manera individual, porque me preocupan y respeto a estas mujeres a las que sé que he fallado”.
Como para evitar que alguien piense que Justin Timberlake está realizando un lavado de imagen de cara a su nuevo álbum inminente, que se espera para este mismo año, respecto al modo en que se aprovechó de su relación con Britney Spears para promocionar ‘Cry Me a River’; o cómo él no fue condenado por el incidente de la teta de la Super Bowl como sí lo fue Janet Jackson; el artista se extiende avanzando que este mensaje es solo el principio de una “larga conversación de la que quiere ser parte”. En una segunda página de su comunicado reconoce que la industria favorece a los “hombres blancos” en el camino hacia el éxito.
Indica: “debido a mi ignorancia, no lo reconocí (…) pero no quiero beneficiarme nunca más de que otros -otras, deberíamos traducir- se vean perjudicadas”. Dice que esta “disculpa es el primer paso que no absuelve el pasado (…) Me preocupo de la gente que amo y he amado. Puedo hacer las cosas mejor y las haré mejor”.
Las disculpas de Justin, que han aparecido en todos los medios generalistas, no parecen haber emocionado muchísimo a los fans de la música pop. Huele a que el cantante ha comenzando con este post la campaña de su nuevo álbum. Y la película sobre Britney era la peor forma de iniciar dicha campaña. Bossip ha recibido miles de apoyos para su titular “la disculpa de Justin Timberlake llega 6.935 días tarde”. Hay quien no le va a perdonar que Janet Jackson fuera cancelada en radios, por marcas, por una tontería, mientras él guardaba silencio o incluso bromeaba sobre ello como se aprecia en este vídeo de un concierto.
Suenan honestas las palabras de Justin Timberlake y pudo haber un antes y un después de las palabras de Nick Cave sobre la misericordia, el perdón y la cultura de cancelación. Pero obviamente no todo el mundo opina lo mismo. Justin Timberlake parece en un momento crítico de popularidad tras el fracaso de su último disco ‘Man of the Woods’ (2018), del que a duras penas se recuerda una canción de country gracias a la intervención de Chris Stapleton; y el desastre aún mayor que supusieron singles tan infumables y desesperados como ‘SoulMate’. Parece que se juega demasiado este 2021, y aquello que trama con gente como Lizzo y KAYTRANADA habrá de estar el doble de cuidado y habrá de ser el doble de bueno y sorprendente en este momento de clima social.