La MET Gala ha vuelto a celebrarse un año más, después de su regreso de 2022, como cada primer lunes de mayo, dejando -como suele ser habitual- un imponente desfile de celebridades que pasean sus «looks» más extravagantes, elegantes o ambas cosas a la vez por la alfombra «roja». Esta vez la temática se centraba en Karl Lagerfeld por sus «incomparables» contribuciones a la moda.
Como de costumbre, algunos han arriesgado más que otros. El look alienígena con pedrería de Lil Nas X ha sido para frotarse los ojos. Claro que luego ha aparecido Jared Leto, siempre «doing the most», disfrazado de gato gigante, y ha logrado dejar también con la boca abierta. Lizzo subía las escaleras expresando «yo no he visto ese gato, ha sido mi imaginación».
Otra felina de la alfombra ha sido Doja Cat, cuyo «look» era uno de los más esperados pues, de un tiempo a esta parte, se ha convertido en el maniquín más experimental del pop. Rihanna, la «reina de la MET», ha vuelto a asombrar con un atuendo floral blanco, acompañada de A$AP Rocky, aunque sin intención de acaparar todos los focos como en otros años.
Vestida de princesa, Dua Lipa también ha hecho acto de presencia en la MET Gala, y el suyo ha sido uno de los «looks» más clásicos. En comparación, Janelle Monáe se ha quedado con el «momento Gaga» de la gala, al pasear un atuendo sci-fi en tres capas. Espectacular.
Otros artistas musicales que se han dejado caer por la MET esta noche han sido Bad Bunny, que, vestido totalmente de blanco, no ha dado memes como el año pasado; Cardi B y Anitta en una faceta más sofisticada y clásica, Billie Eilish con una pinta más punk o, la sorpresa de la noche, el look con capa de Diddy. En honor a Lagerfeld, claro, ha abundado una paleta de negro y blanco.