Parte de la redacción valora ‘Cupid’s Girl’, el último single de MARINA tras la llegada de ‘Butterfly’. Os ofrecemos una opinión a favor y otra en contra. El sucesor de ‘Ancient Dreams in a Modern Land‘ (2021) aún no se ha concretado.
«Los primeros singles de Marina suelen ser mejores que los segundos y vuelve a ser el caso. ‘Butterfly‘ era una actualización novedosa del sonido MARINA gracias a su estribillo kawaii y a su festín de melodías celestiales. Las melodías vocales de MARINA se comportan como si el pop quisiera ser ópera, y son tan inimitables que ‘Good Luck Babe!’ de Chappell Roan recibía comparaciones con el trabajo de Diamandis desde el segundo cero.
‘Cupid’s Girl’ es una composición menos sorprendente. En la letra, MARINA expresa a su amante que no le tenga miedo al amor y le pide que se entregue a la pasión. Quiere que el arco de Cupido haga «doom doom doom» y que el corazón de su chico haga «boom boom boom». El beat electropop es urgente, pero la melodía con sabor a Western no transmite esa urgencia, sino la familiaridad de un viaje que ya has realizado demasiadas veces. Los efectos de producción intentan disimular una composición poco inspirada, pero ‘Cupid’s Girl’ nunca se convierte en una canción «classic MARINA»». Jordi Bardají.
«‘CUPID’S GIRL’ es una de las canciones de MARINA más directas y certeras en su cometido. En el correspondiente «visualizer», hipnotizante, guiña un ojo, apunta y lanza una flecha del amor que no sabemos dónde acaba, pero todo indica que en su objetivo, de pleno.
Estamos ante una de las producciones más electropop de la artista, en la que se ha acompañado únicamente de Cj Baran (Melanie Martinez, Carly Rae Jepsen). Todo en ella funciona: las estrofas, tan deudoras de los años 80, la rima «doom doom doom» con «boom boom boom» del pre-coro, el estribillo en un registro tan agudo que nos hace pensar en Kate Bush y finalmente el post-estribillo instrumental que es el verdadero aliciente de esta canción, para el modo «on repeat»». Sebas E. Alonso.
