Hace ya semanas que me siento extraña... no me apetece opinar de nada en el foro, ni en ningun lado... no tengo ganas de discutir... ¿Me habre vuelto hetero? ¿Sera una lucia etxebarria de la vida?
Yo también estoy plof. Entre el calor y mis vecinos que juegan al fútbol en la plaza hasta las tantas no duermo nada. Al día siguiente soy un parásito incapaz de mover un dedo. Y así todos los días.
Panda de gandulas. Ya veréis cuando acabeis vuestra mierda de carrera y os pongáis a trabajar como adultos y las vacaciones sean tres cochinas semanas al año. Se os va a quitar la tontería a gorrazos, vividores. Y dejad de encadenar postgrados, máster, cursos y cacafutis que parece mentira que no sepáis que NO SIRVE PARA NADA.
(…), y si el señorito se tropezaba con él y le preguntaba, … ¿qué te ocurre, hombre de Dios?, Azarías la misma, … ando con la perezosa, que yo digo, señorito, sin inmutarse, encamado en la torvizca o al amparo del madroño, inmóvil, replegado sobre sí mismo, los muslos en el vientre, los codos en el pecho, mascando salivilla o rutando suavemente, como un cachorro ávido de mamar, mirando fijamente la línea azul-verdosa de la sierra recortada contra el cielo, y los chozos redondos de los pastores y el Cerro de las corvas (del otro lado del cual estaba Portugal) y los canchales agazapados como tortugas gigantes, y el vuelo chillón y estirado de las grullas camino del pantano, y las merinas merodeando con sus crías (…)
Me refiero a lo de @Slavin. Que @elano hace meses que se sentía extraña, que tiene poco que ver ahora con @Slavin. Bueno, últimamente está pasando mala racha.
Comentarios
Y lo segundo también
Clara lectura para el verano
Pero os quiero y tal.
(…), y si el señorito se tropezaba con él y le preguntaba,
… ¿qué te ocurre, hombre de Dios?,
Azarías la misma,
… ando con la perezosa, que yo digo, señorito, sin inmutarse, encamado
en la torvizca o al amparo del madroño, inmóvil, replegado sobre sí mismo, los muslos en el vientre, los codos en el pecho, mascando salivilla o rutando suavemente, como un cachorro ávido de mamar, mirando fijamente la línea azul-verdosa de la sierra recortada contra el cielo, y los chozos redondos de los pastores y el Cerro de las corvas (del otro lado del cual estaba Portugal) y los canchales agazapados como tortugas gigantes, y el vuelo chillón y estirado de las grullas camino del pantano, y las merinas merodeando con sus crías (…)
aun así... Quiaaa, quiaaa
Como me gusta ese libro.
Bueno, últimamente está pasando mala racha.
Mi "¿Y?" que conste que no era impertinente.
Pago por una reunión con elano
@joseramone ponle una velita al gran poder en mi nombre