¿Qué es más aburrido, que Scarlett Johansson se haga definitivamente cantante o que la gente la critique por ello sin darle ni siquiera una oportunidad? Como quiera que ella se haya tomado la acogida del disco de versiones de Tom Waits, que no sabríamos decir si fue buena o mala, la verdad es que de pesada no se le puede acusar, porque este disco junto al cantautor Pete Yorn, más o menos famosillo en EE.UU., lo grabó antes que el otro, en 2006. El concepto era hacer un álbum de rupturas inspirado en los duetos de Gainsbourg y sus chicas, aunque las referencias sonoras en realidad resultan mucho más americanas.
El single que precede el álbum, ‘Relator‘, no es una obra maestra sólo porque no va a ser «maestra» de nada. Por lo demás lo tiene todo: es muy bonita, muy graciosa y se puede bailar. También es perfecta para Scarlett porque no requiere de una complicada técnica vocal y por eso se han atrevido a defenderla en directo en la tele delante de todo el mundo, por ejemplo en el programa de Ellen Degeneres.
En las nueve pistas, son abundantes las referencias a la cotidianidad de una pareja que acaba de romper, como ese dormir en la habitación compartida cuando el otro se ha ido, etcétera. Aunque quizá sólo resulte emocionante de verdad ‘I Don’t Know What To Do’, con ese delicioso «I don’t want you coming here / No way, no way». Scarlett dice que las letras del disco le fueron muy bien para el estado emocional en que se encontraba en aquella época, pero seguramente no tuviera nada que ver con Pete, lo que impide que la química que sí existe entre los dos se termine de convertir en pasión.
Calificación: 6/10
Lo mejor: ‘Relator’, ‘I Don’t Know What To Do’
Te gustará si te gustan: los discos de duetos chico-chica, o mucho uno de los dos.
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