Boat Beam nos han ofrecido una entrevista la mar de salada sobre su segundo álbum, ‘Reincarnation‘. Sin duda, una de las más enrolladas que jamás nos han concedido por e-mail. La australiana Josephine Ayling (Aurora Aroca es española y Alisha Buttke americana), nos deja (en un castellano que puntuamos con un 9,8) un sinfín de simpáticos titulares alternativos como «los grupos emo son los únicos masculinos que se ponen muy guapos. No sé por qué sólo ellos lo hacen». Boat Beam actúan este sábado 12 de marzo en el 19º aniversario de Moby Dick en Madrid. El día 24 lo harán en Barcelona. Después vendrán más fechas.
¿Qué diferencia principal veis entre este disco y el anterior?
‘Reincarnation’ es más optimista que ‘Puzzle Shapes‘. Refleja la seguridad de un grupo que ya lleva 3 años y sabe lo que quiere crear. Pero son similares en otros aspectos. Sigue habiendo una incapacidad de quedarnos en un estilo único… somos un poco agitadas en general.
¿Cómo llegáis a cambios estructurales como el que se produce en ‘Fishing For Spears’? ¿Esta canción tenía un ritmo más plano en principio?
Simplemente, cuando estaba componiendo la canción, me parecía muy implacable el ritmo. Me gustaba mucho pero tenía que haber un cambio, así que metí un puente en 3/4. Me gusta el cambio en general. Siempre cambio de pasta de dientes, por ejemplo, o de peluquería. Digamos que soy adicta al cambio. Y las chicas, bueno, lo aguantan.
En algunas canciones vemos un poso un poco soul, como en ‘Amsterdam 1740’, que podrían cantarla Erykah Badu o Lauryn Hill, ¿lo veis? ¿escucháis mucha música negra?
Hace años cuando salió el primer «demo» de mi primer grupo en Sidney, una crítica decía que mi voz era sosa, y creo que desde este momento he tenido una paranoia inmensa sobre esto. Escucho bastante música negra, pero no creo que llegue a sonar negra en ninguna canción, lamentablemente. Admiro mucho a estas artistas por la cantidad de ideas que meten en sus canciones, y su expresión sin pudor me inspira mucho. Pero tampoco puedo negar mis raíces en el rock y el indie.
Teniendo cuerdas en el grupo de manera permanente, tampoco abusáis de ellas, ¿para vosotras es importante que aparezcan en su justa medida, sin empalagar, o no descartáis una etapa más barroca, por llamarla de alguna manera?
Yo estoy de acuerdo contigo, demasiada cuerda sería una forma rápida de saturar el oído. Usamos otros instrumentos cada vez más para dar un poco más de variedad a nuestra música y ahora mismo estamos intentando decidir si seguimos con el formato de batería y bajo o hacemos algo radicalmente diferente para el próximo disco.
¿Creéis que el futuro de Boat Beam va más bien por ‘Sirens’ o por pistas más electrónicas como ‘Axis of Rotation’?
No lo sé, depende de si hablas con Alisha, Aurora o conmigo. Yo estoy cada vez más interesada en la música electrónica, me encantan grupos como Four Tet, pero no siempre compartimos gustos. Ya veremos quién gana esta batalla.
¿Significa el epílogo final del disco que tiraréis más por ahí en el futuro?
El epílogo es un vínculo con los primeros segundos del disco, y lo hice porque quería hacer un círculo. Quería que el disco termina donde empieza, una alusión no muy sutil a la reencarnación. Pero sí, me gustaría hacer música menos pop y un poco más experimental en el futuro.
La redacción de JNSP está dividida: unos pensamos que ‘Sirens’ es la mejor canción de vuestra carrera y otros que hay mejores temas en el disco, ¿qué lugar ocupa para vosotras? ¿Es de las más especiales para vosotras o no?
Sí, ‘Sirens’ es muy especial para nosotras porque la compusimos juntas en una tarde, unas cuatro horas sin parar. Alisha había llegado con una idea y la desarrollamos y salió muy bien. A mí me alegra que a la gente le gusten diferentes canciones, porque significa que hemos conseguido cruzar el espectro de emociones y llegar a las distintas sensibilidades. Estoy bastante influida por lo que opinan los oyentes porque creo en sus gustos.
¿Tenéis algún videoclip en camino? En el de ‘The Rain Pauly’ creo que captasteis muy bien lo que es el grupo…
Sí, estamos haciendo un vídeo para ‘Sirens’ la semana que viene. Según parece, va a tener un rollo Hitchcock. O sea, muy distinto al de ‘The Rain Pauly’, pero estoy segura de que va a capturar qué es el grupo ahora.
¿Cómo van a ser los nuevos directos? ¿Aparte de vosotras tres participarán más músicos tipo Charlie Bautista?
Ahora mismo tenemos a Utah de The Right Ons tocando el bajo, y nuestro batería de siempre, Qmins, y son geniales. Charlie está muy ocupado con sus otros proyectos, pero siempre que podemos vamos a verle en sus conciertos. Me encanta el directo que tenemos ahora, porque tiene mucha dinámica y conseguimos combinar fuertes ritmos con mucha melodía.
Vuestras letras van cargadas de poesía y metáforas diversas, ¿qué importancia dais a la letra en una canción?
Soy una escritora frustrada, o sea, perezosa. Me gustaría escribir novelas, pero en realidad escribo canciones. Son historias que crecen en mi mente como unos bichos raros, y los saco en la música. Suelen tratar de cosas que me conmueven, cosas que leo o veo en mis viajes. Me inspiran mucho los lugares y situaciones oscuras, todo lo que se puede llamar «olvidado» me atrae mucho.
Habéis tocado alguna vez para niños. El hecho de que hagáis música pop-rock con instrumentos de cámara, ¿creéis que ayuda a que los niños o adolescentes desmitifiquen la música clásica y se animen más a aprender a tocar, por ejemplo, el chelo o la viola?
Bueno, cuando tocamos este concierto en La Casa Encendida un niño me gritó: «canta en castellano» y cuando no lo hice, dejó de prestarnos atención. Creo que volvió a jugar con sus amigos, y yo lo entiendo. A lo mejor alguna joven nos ha visto y ha pensado seriamente en aprender un instrumento clásico, ojalá que sí, pero se necesita mucha disciplina personal y apoyo familial para hacerlo. Yo dejé de tocar el violín cuando tenía 8 años, después de mentirle a mi profesora por 6 meses diciendo que estaba enferma y no podía ir a las clases. Admiro mucho a Alisha y Aurora, pero creo que en general cada una tiene su propia salida creativa, y hay mil formas…
¿Qué sensaciones os ha traído la presentación de vuestro segundo disco? ¿Sentís que la gente y la crítica os va a mirar más con lupa?
Acabo de poner «lupa» en un traductor online y me dice que la palabra significa «magnifying glass». ¡Qué curioso! Nunca sentimos que la gente nos escudriña, o por lo menos no somos conscientes, y no me parece muy lógico que lo haga. Si fueramos políticos cuyas acciones realmente afectaran a la gente lo entendería, pero somos músicos y artistas, y lo que creamos no daña a nadie. O sea, si no le gusta a alguien, lo único que tiene que hacer es simplemente no escucharlo. Por suerte hemos recibido muchos mensajes de fans en Facebook y Twitter, y también en los conciertos nos ha dicho mucha gente que le gusta el segundo disco, lo cual nos alegra mucho.
Sufrimos un poco viéndoos en el Low Cost, la acústica de la plaza de toros no era muy buena y el sonido rebotaba bastante, ¿recordáis este concierto especialmente bien o mal? ¿Os sentís más a gusto en lugares más pequeños?
Nunca íbamos a sonar bien en una plaza de toros, «kármicamente» es imposible. Las fantasmas de todos los pobres toros que han muerto ahí se mezclaban con el sonido de las cuerdas, creando una especie de llanto bastante asqueroso. Sin embargo, lo pasamos muy bien, como siempre en nuestros conciertos, porque la gente era muy cálida. Los sitios pequeños nos gustan pero somos ambiciosas y queremos tocar escenarios grandes, incluso en plazas de toros si hace falta.
¿Es duro para Aurora compaginar sus fechas con Christina y con el grupo? ¿Cómo se os ha ocurrido programar un disco a la vez? ¿Habrá alguna fecha conjunta?
No, porque ella comunica bien sus disponibilidades y hasta ahora no hemos tenido ningún choque de fechas. Fue casualidad que nuestros discos salieran a la vez pero se ha dicho que la promoción de uno «se alimenta» de la del otro, así que no nos quejamos.
¿Dónde estabais cuando os enterasteis de que Mar Flores era fan? ¿Os enviasteis mensajes entre vosotras?
Yo sigo sin entender realmente la importancia de esta noticia. Pero sé que es una persona importante en el imaginario español, así que me alegra un montón que ella haya escuchado Boat Beam. ¡Ya somos oficialmente parte de la sociedad española!
¿Qué es lo más inesperado que os ha pasado desde que sacasteis vuestro primer disco?
La gira a Vietnam y Japón, sin duda. Estas oportunidades han sido muy inesperadas y muy bienvenidas.
¿Por qué creéis que tanta gente habla de «otro grupo de chicas con guitarra» de manera un tanto despreciativa y nadie habla de «otro grupo de chicos» frente a propuestas como Lori Meyers, Vetusta Morla, Love of Lesbian, etc?
Mucha gente acepta que lo normal es que los hombres tocan música y lo raro es que las mujeres lo hagan, entonces le molesta y dice estas cosas. Siempre me ha sorprendido que alguien puede ser muy moderno en muchos sentidos pero a la hora de juzgar los papeles de las mujeres y los hombres en la sociedad, es como primitivo. Podría ser también el marketing de los grupos, que los grupos de chicas casi siempre vamos bien vestidos, con atención a nuestro aspecto, mientras que con los grupos de chicos el enfoque está casi siempre en la música y punto (excepto las bandas de emo, que se ponen muy guapos, no sé por qué sólo ellos lo hacen). Pero esto son teorías, nada más. ¿Alguien tiene una opinión sobre esto? Me gustaría saber qué piensa la gente, porque yo tengo un punto de vista no muy objetivo.
¿Tenéis descartes del disco para algún single o EP, o algún plan de otro tipo?
Ahora mismo sólo nos estamos enfocando en esta gira, y después empezaremos a componer juntas para un tercer disco. Sobre todo, queremos seguir siendo parte de la escena musical en España, que mola mucho.
Foto: Josefina de Andrés.