Miike Snow, el grupo formado por los dos productores de ‘Toxic’ Bloodshy & Avant y el cantante Andrew Wyatt, resuelve en su segundo álbum la carencia de una canción tan carismática como ‘Animal’ de su debut homónimo con una buena sucesión de videoclips hilvanados. De la abducción y conversión de un ser humano en ‘Paddling Out‘ pasamos a la traumática -aunque siempre en clave de humor- vuelta a la Tierra de ‘The Wave‘ y ‘Devil’s Work‘.
Esta idea viene a decirnos que Miike Snow siguen molando, lo que por supuesto tiene una correspondencia musical. ‘Happy To You’ se abre con la indietrónica ‘Enter The Jokers Lair’; cuenta en ‘Black Tin Box’, junto a Lykke Li, con la sofisticación siniestra de The Knife, o como mínimo iamamiwhoami (todo queda en Suecia); y resuelve pistas que podrían haber sido aburridas revisiones de Primal Scream circa 1990 con arreglos percusivos y sintéticos de todo tipo (‘Vase’).
Pero aparte de la genial ‘Toxic’, Christian Karlsson y Pontus Winnberg son también responsables de dos de las peores canciones de ‘Confessions On A Dance Floor‘ de Madonna o de aquel desaguisado de productores que fue el aun así reivindicable ‘X‘ de Kylie. Y eso es algo que se nota en ‘God Help This Divorce’, un corte tristón con una letra poco más que vaga y abstracta que no dice mucho; en la épica sólo conseguida a medias de ‘Archipelago’; o en ‘Bavarian (Say You Will)’, que podría haber silbado la Spears. En esta última pista se repite un truco que minutos antes les había salido muy bien: el de las marchas militares en ‘The Wave’, justo cuando su letra deja caer bombas. Y es que Miike Snow tienen buenas y extrañas inquietudes dentro del mundo del pop, pero aún tienen que seguir entrenando para hacer canciones más perdurables.
Calificación: 6,8/10
Lo mejor: ‘Enter The Jokers Lair’, ‘The Wave’, ‘Vase’, ‘Paddling Out’
Te gustará si te gustan: Passion Pit, Postal Service, Britney
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