Esta madrugada, hora española, Beyoncé actuaba en el descanso de la Super Bowl. La cantante optaba por el formato popurrí, interpretando en vivo y sobre un buen fondo audiovisual y coreográfico varios singles de su carrera, tanto junto a sus compañeras en Destiny’s Child como en solitario. De una forma o de otra ‘Crazy In Love’, ‘Baby Boy’, ‘Single Ladies’, Love on Top’ e ‘Independent Women’, entre otras, pasaron por el repertorio, impidiendo que alguna de ellas pudiera destacar de manera decisiva. Al igual que Madonna el año pasado, Beyoncé escogió una canción de tintes religiosos para cerrar, en este caso ‘Halo’. El evento fue seguido, comentado y altamente comparado con el de Madonna en nuestros foros en directo.
La artista acaba de anunciar una gira mundial para primavera que no pasará por España.