‘2013’ no es el single perfecto de Primal Scream ni un top 10 en su carrera. Puede que le sobren un par de minutos (también a su por otro lado excelente vídeo, realizado por la artista sevillana de 22 años Rei Nadal), pero sí es interesante por diversos motivos, y no me refiero a las guitarras de Kevin Shields, que nunca habría reconocido, honestamente. Contiene algo a punto de desbocarse -si no llega a hacerlo cuando Gillespie se desgañita cuando está a punto de cerrarse la canción- que no puede sino remitirnos al caos del mundo en que vivimos en este 2013. «Es la solución final a la revolución adolescente / la subyugación total de la nación del rock ‘n roll / reclutada, corrupta, seducida y reducida / engañada, excluida / encadenada y decaída», dice Bobby, apocalíptico. Ignoro si es el objetivo, pero no puedo evitar pensar que nadie aun a día de hoy mejor que Primal Scream para ilustrar con música esa sociedad condenada al desastre que reflejan series como ‘Black Mirror‘». Sebas.
«A riesgo de ser acusado de #postureo, pienso que la versión completa de ‘2013’ le da cien mil vueltas a la breve que Primal Scream presentaron inicialmente a modo de teaser. Lo que entonces parecía su enésima reinterpretación de una escala de boogie con un estribillo bien hueco que se limita a repetir el horrible año en que vivimos, cobra nuevo sentido en unos nueve minutos que hipnotizan, gracias a ese loco saxo glam, en un desarrollo creciente hacia ese vigoroso final. Esperanzador». Raúl Guillén.
«Minuto 00:21. Uy, que me duermo… Me despertáis cuando quiera que termine esto, ¿ok?». Angèle.
«El saxo que da comienzo a ‘2013’ me recordaba inicialmente a The Psychedelic Furs, pero pronto empezaron a sonar las guitarras y la voz de Bobby Gillespie y todo recuperó su contexto. En ‘Beautiful Future’, Primal Scream abandonaron la bipolaridad de sacar uno o dos álbumes electrónicos seguidos de otro rockero, juntando ambos mundos. Aquí, sin embargo, parecen volver al rock, pero habrá que escuchar el resto de ‘More Light’ para constatarlo. Lo malo es que la única gracia del tema está en la melodía del susodicho saxofón y en el pulso de las guitarras psicodélicas, pero no parece un single poderoso a la altura de ‘Can’t Go Back’, ‘Miss Lucifer’, ‘Swastika Eyes’ o incluso ‘Country Girl’. Habrá que esperar. Por ahora, me quedo algo tibio con este adelanto». quietmansmiling.
«Primal Scream nunca han sido un cajón repleto de ideas, más bien de pocas muy bien colocadas. Ahora repiten esquemas pero con arreglos de saxofón y de guitarras que, como gotas de Chanel nº 5, le dan el tono adictivo suficiente para que te contagies de la intensidad a la que nos tiene acostumbrados Bobby Gillespie». Sr John.