El nuevo lanzamiento de Leonard Cohen respecto al anterior supone el menor lapso entre disco y disco de su carrera desde los años 70. ‘Popular Problems’ se lanza además para coincidir con su 80º cumpleaños, exactamente hoy domingo 21 de septiembre, y la tentación es clara: ser demasiado benevolente porque el autor de ‘I’m Your Man’, ‘Songs of Leonard Cohen’ o ‘Death of a Ladies’ Man’ se lo merecería. Poniéndonos firmes quizá podríamos argüir -echándole dos huevos, la verdad, si tenemos en cuenta su edad- que el cantautor está demasiado asentado en un tipo de canción susurrante y falsamente minimalista y sencilla, que arranca con unos pocos rasgos del blues y otros del jazz y se culmina con la incorporación de coros femeninos y algún arreglo de cuerda o viento. Pero el fin justifica los medios y poco a poco irás comprobando que (casi) cada canción tiene su razón de ser en esta nueva colección de nueve piezas.
El single ‘Almost Like the Blues‘ encierra sentimientos encontrados («mi padre dice que tengo suerte / mi madre dice que no»), versando principalmente sobre el mal estado del mundo, hablando de la guerra y de la tortura, de los niños desaparecidos y del asesinato, pero con el grado justo de amargura, incorporando el sentido del humor al equiparar todos ellos a las «malas críticas» recibidas por el artista en el pasado. Dos cosas, el blues y el humor, que también aparecen en el corte que abre el disco inmediatamente antes. Porque si ‘Old Ideas‘ (2012) comenzaba con aquella inolvidable frase «me encanta hablar con Leonard (….) Es un vago bastardo con traje puesto», este lo hace de la siguiente manera: «estoy bajando el ritmo de la canción / nunca me ha gustado lo rápido / quieres llegar pronto / y yo ser el último / y no es porque sea viejo / es que no es la vida que he llevado / siempre me ha gustado despacio / eso es lo que mi madre me enseñó». De acuerdo. Este párrafo no estaría tan cargado de significado entonado por un cantautor sin el background de Leonard Cohen: se está riendo de sus casi 50 años dedicados a la música, pero al mismo tiempo, ¿no resultaría encantador en boca de cualquier octogenario, de la misma forma en que un álbum fresco, urgente y rápido funciona a cualquier grupo adolescente?
Leonard Cohen se vale sin duda en ‘Popular Problems’ de su experiencia para cerrar canciones con arreglos preciosos, como sucede en ‘Samson in New Orleans’, logrando de nuevo el tono ceremonioso y solemne tan habitual de los últimos años, tanto en estudio como en sus múltiples giras. Pero quizá tiene más mérito todavía la afabilidad de algunas canciones después de tanto tiempo. Desde la primera escucha, hay un tema que enamora. Se trata de ‘Did I Ever Love You’, situado estratégicamente justo a la mitad. En principio parece otro corte más en la línea de los temas mencionados, pero en su estribillo se convierte en un delicioso country mientras su letra mira al pasado con nostalgia y arrepentimiento pero también de nuevo con sorna («¿alguna vez me peleé contigo? / Mejor no contestes»). Sus sencillas metáforas, sobre árboles que florecen y se marchitan, no pueden sonar más apropiadas para el juego de voces entre Cohen, grave en las estrofas, y ellas, aportando un armonía más luminosa.
Música y letra confluyen igualmente en ‘A Street’. Su letra también aferrada a una relación vivida en tiempos remotos deriva en una coda cargada de esperanza: «La fiesta se ha acabado / pero he aguantado de pie / permaneceré en esta esquina / donde antes había una calle». El final en «fade out» le da un sensación de perdurabilidad tan hermosa que desearías que se extendiera más. Y por cierto también había cabido el humor: «te vestiste de uniforme para luchar en la Guerra Civil / te quedaba tan bien que no me importó de qué lado ibas».
Leonard Cohen se está mostrando muy agradecido en la presentación del disco hacia su co-autor desde hace un par de años Patrick Leonard, llegando a decir que sin él este álbum no habría sido posible. Patrick es conocido, más que nada, por haber estado involucrado en tres de los discos mejor considerados de Madonna: ‘True Blue’, ‘Like a Prayer’ y ‘Ray of Light’. Nos preguntamos si hay que culparle de la introducción étnica en ‘Nevermind’, tema de bajo funky, casi bailable, pero lo claro es que Cohen ha encontrado a un co-autor perfecto para expresar sus inquietudes personales, políticas y religiosas. Eso sí, también es relevante destacar el único corte que Cohen ha escrito en solitario para este álbum.
Se trata de ‘Born in Chains’, que dice haber ido perfeccionando durante 40 años para amoldarlo a su posición teológica. La canción parte de un trágico nacimiento para topar con los vaivenes de la vida. El bonito puente antes del último estribillo resulta casi infantil, mientras la melodía parece remitir de vez en cuando a ‘Hallelujah’. Una autorreferencia expresa en la siguiente canción, la última, otro bonito guiño country de corte optimista que podría haberse llamado ‘The Hallelujah Song’ pero que recibe el nombre de ‘You Got Me Singing’, quizá para recalcar la ilusión de vivir y de vivir por la música que transmite. Muy pertinente teniendo en cuenta las circunstancias por las que Leonard Cohen tuvo que volver a la actualidad musical, arruinado y estafado por su representante.
Después de todo esto, es difícil pensar que el mundo es benevolente con Leonard Cohen, pues el cantautor empatiza sin quitarse el sombrero con esas inquietudes del pueblo a que remite el nombre del álbum. «¿Fue nuestra plegaria tan poco merecedora / de que el sol la aceptara?», se pregunta en una de las letras, dejando vía libre para la interpretación concreta de cada uno. Como mucho podremos decir que la letra de ‘My Oh My’ es un poco vaga (aunque se agradece como medio tiempo medio pop a mitad de la secuencia), o que eliminaríamos algún viento en esta misma pista. Por lo demás, ‘Popular Problems’ es todo lo que podemos pedir a un artista que hemos seguido durante décadas… o lo que querríamos de un joven autor en su tercer álbum. Feliz cumpleaños, maestro.
Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘Did I Ever Love You’, ‘Almost Like The Blues’, ‘You Got Me Singing’, ‘A Street’
Te gustará si te gusta: mirar al pasado con nostalgia, pero sin arrepentimientos
Escúchalo: The Guardian