El cantante británico Colin Vearncombe, más conocido como Black, sufría un accidente de coche hace un par de semanas. Las noticias no eran nada alentadoras este fin de semana, pues su familia indicaba que hacía falta «un milagro» para salvar su vida después de que el escáner revelara heridas cerebrales mucho más graves de lo esperado. Finalmente, ha fallecido a los 53 años.

Black siempre será recordado por el exitazo de ‘Wonderful Life’, una maravillosa canción en la que adivinamos influencias sobre Hurts, Lana del Rey o incluso Destroyer, James Blake y Jamie xx. Black nunca pudo igualar el éxito del debut que la contenía, sin embargo no fue one hit wonder: son muchos los temas que hemos recordado estos días, ‘Everything’s Coming Up Roses’, ‘The Big One’, ‘Sweest Smile’, ‘Something for the Asking’… Su último trabajo recibía el nombre de ‘Blind Faith’ y databa del año pasado.

El comunicado dejado anoche en Facebook decía lo siguiente: «nos entristece profundamente anunciar la muerte de Colin Vearncombe este martes 26 de enero. Colin nunca recuperó la consciencia después del accidente sufrido hace 16 días. Murió en paz rodeado de su familia, que cantaron para él en su despedida. Su mujer Camilla y sus tres hijos han agradecido al equipo de la UCI del Hospital Universitario de Cork diciendo: «Colin recibió la mayor atención de los expertos y del equipo profesional y estamos totalmente agradecidos por todo lo que han hecho». El funeral será privado, pero haremos un acto en Liverpool próximamente ya que sabemos que hay mucha, mucha gente que querrá celebrar la vida y la obra de Colin. Pronto se anunciarán fechas y hora, junto a los detalles de la organización benéfica para el recuerdo de Colin. No hay que reír o llorar, It’s a wonderful, wonderful life».