Esto suena a hype, pero mientras dure, que nos quiten lo bailao. Se trata de Morningwood, una nueva banda neoyorquina que tiene todo lo necesario para triunfar en Europa (en EEUU no gusta este tipo de grupos, o si no que se lo digan a Scissor Sisters): un nombre sucio pero que suena muy bien (significa, según tengo entendido, erección matinal, aunque hay varias teorías al respecto), la fuerza del rock, lo bailable del electropop, una frontwoman muy carismática, una imagen llamativa e imitable y un logo muy chulo. Ya lo tienen todo hecho. Su disco de debut, grabado en Londres bajo la batuta de Gil Norton (Pixies, Echo and The Bunnymen…) se llama como ellos y es una pieza que si bien no pasará a la historia, nos hará pasar más de una noche entretenida.
Los verdaderos protagonistas de Morningwood son Pedro Yanowitz (ex Wallflowers, entre otras bandas) y, sobre todo, Chantal Claret, la vocalista. Esta chica tiene sólo veintitrés años pero pone rostro y voz desde sus tiernos diecisiete esta banda con una energía arrolladora. No es muy guapa ni está muy buena, pero transpira sexo por todos sus poros. Lo podéis comprobar en las galerías de fotos y en los vídeos que hay en la web de la banda: es una bomba sexual. Detrás de esta imagen tan cuidadosamente salvaje -yo me declaro súper fan de sus pelos, aunque reconozco que están bastante pasadillos de moda- se esconde una voz que ella modula a su antojo; oscila desde la inocencia popi en temas como ‘Nth Degree’ hasta los berridos propios del hard rock en ‘Nü Rock’, ‘Jetsetter’ o ‘Television’. Además, Chantal sabe bailar como una auténtica guarra, por lo que la acción en directo está más que garantizada.
Y, algo muy importante, Morningwood puede sonar en las pistas de baile, porque han sabido aunar el espíritu bailable del pop adolescente con los riffs de guitarra propios del rock. Como toda banda emergente (aunque han fichado por Capitol, nada menos), tienen su propio myspace y actualizan con bastante regularidad un diario que hay en su web oficial. El próximo 31 de mayo actúan en Madrid en la Sala Moby Dick. Yo, no me lo pierdo. 7