Ingredientes (para 3 personas):
9 puñados de espirales de colores
250 g. de jamón de york en taquitos
1 lata de maíz
3 latitas de atún en aceite vegetal
aceite de oliva
sal
pimienta negra (opcional)
Para esta semana os propongo otra receta refrescante y sana, que para comer podéis presentar como primer plato antes de un pescado o servir como cena ligerita. Fácil tener sus ingredientes a mano, no emplearéis mucho tiempo y de muy sencilla preparación. Yo no tenía en casa las espirales de colores, así que he usado las normales, pero las de colores quedan mejor, más vistosas y se logra un plato más colorido y bonito. Lo primero que tenéis que hacer es poner a hervir agua en una cazuela, con una pizca de sal y unas gotas de aceite para que quede la pasta más suelta. Cuando esté hirviendo, echad las espirales para que se cuezan durante unos 8-10 minutos, dependiendo de si queréis la pasta más durita o menos. Sacad la pasta, escurriendo el agua, y pasadla por agua fría para que quede suelta del todo y se enfríe. Ya con las espirales frías, añadid los taquitos de jamón y el maíz. Escurrid bien el aceitillo que trae el atún y antes de añadirlo, os recomiendo que con un tenedor lo machaquéis para que quede bien menudito y así luego no os encontréis trozos gordos por la ensalada. Bien, pues echad el atún, sal, un chorro de aceite de oliva y removed todo para que se mezcle. Si os gusta la pimienta negra, pues ya sabéis.
Esta es una mediocre opción para hacer una ensalada de pasta. Podéis crear otras más exóticas tomando como base las espirales y utilizando por ejemplo, gambas, salmón y tacos de tomate; o manzana, queso de cabra y nueces.