¿Qué no hemos dicho de los directos de Franz Ferdinand que no se sepa? Que el grupo siempre lo da todo en directo, que transmiten una energía tal que te ves obligado a cantar y bailar aunque no te apetezca, que tocan trallazo tras trallazo… Pues anoche el Palacio de los Deportes de Madrid se volvió a abarrotar para que 15.000 personas (más las que consiguieron colarse, que las vimos) disfrutaran casi exactamente del mismo caramelito que los de Glasgow habían ofrecido meses atrás en Barcelona en un espacio más reducido.

Presentaban ya más oficialmente el flojillo ‘Tonight‘, un disco que crece bastante en directo gracias a esa electricidad que consiguen transmitir Kapranos y los suyos. Ciñéndose al guión habitual de sus conciertos, un tanto repetitivo, Franz Ferdinand triunfaron sin sorpresas. Abrieron a lo grande con ‘The Fallen’, seguido de hits como ‘The Dark of the Matinée’, ‘Michael’ o el sobadísimo ‘Take Me Out’, alternándolo todo con las canciones más bailables (‘Ulysses’, ‘No You Girls’…) de su último trabajo, que eran las que arrancaban menos aplausos del público, por otra parte. La apoteosis llegó en el bis con ‘This Fire’, un broche de oro para, ya decimos, un show calcadito del último que ofrecieron en la Ciudad Condal. Incluso mantienen el numerito de la batería (para quien no lo sepa, todos los miembros cogen unas baquetas y se van poniendo a tocar uno a uno hasta que están todos a la vez) antes del bis, algo que ya huele sobre todo para los que los hemos visto mil veces en directo.

Pero quizás esto es lo que hace tan adorable a esta banda, que saben exactamente lo que quieren sus fans y se lo dan sin pensar en si se repiten o no. Fuentes de prensa nos confirmaron que son verdaderamente encantadores, que antes de salir a tocar hicieron un meet & greet con los fans y que estuvieron de lo más simpático haciéndose fotos con todos, regalándoles púas y baquetas y charlando tan contentos. Sobre el escenario hicieron exactamente lo mismo, agradeciendo continuamente al respetable su asistencia («gracia», decían todo el rato), soltando frases en español cada dos por tres y diciendo lo bien que se portaba el público de Madrid.

Aún a riesgo de repetirme más que ellos, me mantengo en mis trece: un conciertazo, como siempre. Por su falta de originalidad en la puesta en escena y repertorio les doy un 6, pero por estar tan en forma como siempre y conseguir que, a pesar de su poca variedad, no parase de bailar y chillar como una loca, un 9,5. Media aritmética: 7,75.

Foto: Lalitaporfavor en Flickr. Tiene un montón.