Pumuky recuerdan a Los Planetas porque Jaír canta como Jota y sus letras son un desafío constante a la derrota. Quitada ya de encima esta inevitable comparación, la verdad es que ‘El bosque en llamas’ es un disco que jamás firmarían Los Planetas. El tipo de arreglos, pianos, teclados o acordeones, lleva el segundo disco de este grupo a paisajes también oscuros, pero a menudo en contraste con un mundo de luz más propio de Patrick Wolf (el Patrick Wolf que conocíamos hasta ahora, no el nuevo), al que citan como influencia.
La pista sorpresa, en la que se encuentran las distorsiones con los teclados, medio infantiles y oníricos, definen el álbum con tanto acierto como su título. Son turbias las canciones de Pumuky en las que hablan sobre desaparecer para siempre, pero a veces guardan las esperanzas de que todo vaya a mejor, aunque sea de una forma decadente, como en ‘Los enamorados’, el gran temazo de este disco, en el que los dos tristes protagonistas tratan de superar su aburrimiento enamorándose.
Marina de Klaus & Kinski hace los coros en uno de los temas, Pepo Márquez de Grande-Marlaska toca la guitarra en cuatro, Arturo Vaquero añade un sintetizador en ‘La metamorfosis’ y Abraham Boba el acordeón, el Hammond y el piano en varias canciones. Aunque parece la producción de Pumuky la que sabe dar una sensación de conjunto perfecta con momentos de intensidad tan acertados como ‘Puzzle’.
Calificación: 7/10
Temas destacados: ‘Los enamorados’, ‘El eléctrico romance…’, ‘Puzzle’
Te gustará si te gusta: Patrick Wolf, Los Planetas, Migala
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