Discos de la década: The Cardigans

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Discos de la década: The Cardigans

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En 2003 todo el mundo estaba bastante decepcionado de los grupos que habían triunfado en los 90. La mayoría estaban separados, desaparecidos o haciendo malos discos. Los Cardigans también decepcionaron en un principio con ‘Long Gone Before Daylight’. ¿Qué hacían pegándole a la música americana en todas sus formas? Sin embargo, enseguida te dabas cuenta de que ‘For What It’s Worth’ era la mejor canción que habían escrito, y a partir de dejar la que la sigue en el disco, ‘Lead Me Into The Night’, por inercia, y después otra y otra; de que detrás del álbum se escondía un discazo.

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Antes de publicar ‘Long Gone Before Daylight’, los Cardigans habían estado separados desde 2000. Aunque en Estados Unidos se quedaron en «one hit wonder» con lo de ‘Lovefool’ y en Japón nunca volvieron a triunfar como con ‘Carnival’, ‘Gran Turismo’ fue un gran éxito en toda Europa y la gira se extendió dos años, dejándoles completamente extasiados y aburridos de sí mismos. En una entrevista en 2006 el bajista Magnus nos comentaba que en aquella época hacían una versión de Kraftwerk en directo y que de no haberse separado temporalmente, habrían seguido por esos derroteros.

Sin embargo, Nina aprovechó el descanso para formar A Camp y publicar un disco en el que su marido Nathan Larson, compositor de bandas sonoras indies, y Mark Linkous de Sparklehorse, estuvieron profundamente involucrados. Ambos aparecen en los agradecimientos de ‘Long Gone Before Daylight’, y no es de extrañar. Si bien el disco de A Camp contenía alguna pista electrónica, lo que predominaba eran los guiños country, las canciones sobre ojos azules de Texas, las baladas folk. Y es este sonido el que el grupo decidiría seguir al volver al trabajo.

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Para conseguirlo, decidieron llamar a Tore Johansson, su productor de siempre. En los 90, cuando Saint Etienne contrataron «al productor de los Cardigans», muchos se burlaron de que trataran de imitar su sonido comercialoide, pero en los 2000, Tore se estaba convirtiendo en un productor indie de prestigio, sobre todo gracias a su trabajo con unos emergentes Franz Ferdinand. Sin embargo, para sorpresa de todos, ahora que Tore era famoso, por primera vez las intenciones de grupo y productor no cuajaron y Tore tuvo que abandonar la grabación a la mitad.

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El problema que puso Johansson es que los Cardigans querían un sonido demasiado perfecto y preciosista para las canciones. Aunque grababan en directo, tocando a la vez dentro de la misma habitación, los arreglos de cuerda y la falta de garra de las guitarras en algunos temas terminaron por desquiciarle. Ambas partes reconciliarían intenciones en el siguiente ‘Super Extra Gravity’, promocionado como «el hermano adolescente y furioso de ‘Long Gone Before Daylight'», pero este guardaría definitivamente su sonido «adulto», en lo que el propio grupo considera por unanimidad su gran obra maestra.

Ciertamente, algunas de las canciones son dulces. Entre ellas las dos principales, el primer single, ‘For What It’s Worth’, una declaración de «la palabra de cuatro letras» que no te atreves a pronunciar, que cuenta con un emocionantísimo final; y ‘Communication’, que aunque nunca fue un single, sería escogida como la mejor canción del grupo por los oyentes de una radio sueca. Un tema que habla sobre «récords de paciencia» en la búsqueda de la pareja perfecta, y que probablemente tiene un doble sentido para la banda como un todo, al tratarse de la primera canción que escribieron juntos después del parón.

Sin embargo, a pesar de lo aparentemente meloso, como siempre, el disco contendría un lado ciertamente oscuro y pesimista que se revela en las letras y en el título del álbum. En cuanto a temática, las canciones centrales son, sin duda, ‘Lead Me Into The Night’ y ‘03.45: No Sleep’. ‘Lead Me Into The Light’ habla sobre ir a la deriva, pero gustosamente, en lo que parece un ejercicio masoquista sobre la necesidad del ser humano de buscar el sufrimiento («llévame hacia la oscuridad, por favor apártame de la luz»); mientras que ‘03.45: No Sleep’, situada en una noche de insomnio, insiste en lo mismo, añadiendo al final una nota un tanto absurda en medio de este drama medio emo, totalmente típica de Nina («Si Dios me pasara el micro para que hablara, diría «quédate en la cama, descansa en paz»).

‘You’re The Storm’, que sigue una línea muy parecida, tuvo además una segunda lectura al coincidir su lanzamiento como single con la guerra de Irak. Frases como «si quieres, soy tu país», «ven a conquistarme, lanza tus bombas, cruza mis fronteras y acaba con la calma», aparte de una oda al comentado deseo de sufrir, adquiría un más que interesante doble sentido en su momento histórico.

El disco se completaría con otras preciosas baladas como ‘Feathers And Down’, una promesa de apoyo hasta el final, o ‘And Then You Kissed Me’, inspirada en un tema de Phil Spector; y otras más agresivas como ‘Live & Learn’, que con su sonido AOR, resume perfectamente las nuevas intenciones musicales del grupo (quizá porque tardaron 9 largos meses en terminarla): Nina, junto a Ebbot Lunger de The Soundtrack of Our Lives, cantando sobre las lecciones de la vida tipo «sabía que tenía razón pero aprendí que estaba equivocada», sobre las guitarras totalmente sureñas, alejándoles drásticamente de todo lo que habían hecho antes.

‘Long Gone Before Daylight’ fue el mayor fracaso comercial del grupo hasta la fecha y recibió críticas antagónicas. El NME o The Guardian lo puntuaban con un 8, Pitchfork con un 6,5 y Rock de Lux lo despedazaría completamente. En Suecia se convertiría en un clásico manteniéndose en lista durante más de un año y alcanzando el doble platino; culminando su éxito al hacerse con el Grammi al mejor álbum sueco del año, superando ‘Deep Cuts’ de The Knife, que ganarían este mismo premio con su siguiente CD.

En realidad era un disco completamente redondo, con interesantes caras B (como ‘Hold Me’, no incluida probablemente por lo que les costó casar su línea de piano), y al que sólo se le pueden poner dos pegas: el diseño del libreto y el extraño orden de las canciones, que relega dos de sus singles y casi todas las mejores canciones a la segunda mitad. Me quedo con mi propia disposición.

La versión estándar del disco en Spotify, aquí.

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