Andrés Calamaro ha decidido cerrar su cuenta en Twitter de mala manera, según ha explicado en su blog, calificando la red social como «coro de subnormales generadores de concepto light» y concluyendo «que asco de post modernismo (perdon si me rio)».
La frase estrella es «140 caracteres pueden meterselos profundo en el medio del ojete me importa tres pepinos perder un segundo mas en el rebaño de boludos con blackberry o lo que es peor …. conectados a la nada a cambio de demostrar que son infantiles», aunque este párrafo que, como en el caso anterior, cortamos y pegamos sin más, le va a la zaga: «lo prometido es deuda y cuando el coro de pichaflojas llego a cienmil (no voy a decir almas porque no se puede generalizar), algunos de los cuales fueron contertulios con sustancia (siempre hay un margen de un dos % que se salvan del naufragio de las vergüenzas), despues de un gracioso coqueteo con un aparente cabinet (lobby) de abogados y publicistas lisergicos, reclutados para gestionar la , ahora, ex-cuenta, pues le puse punto final al feedback con el carnaval careta, los falsos profetas de la nada misma y la resaca de la fauna humana (?) irrespetable, insolente y desinteresante … sigo con mi vida, que es suficiente».
Vía Rolling Stone