Es incontestable que el éxito de series como ‘Anatomía de Grey’ ha propiciado que el drama médico con fuerte componente amoroso esté más en boga que nunca. En España tuvimos nuestra buena ración para todos los públicos con ‘Médico de Familia’, y aun a día de hoy ‘Hospital Central’ sigue emitiéndose (esto sí que es todo un expediente X). En los Estados Unidos, sin embargo, han decidido darle un nuevo toque a este tipo de series y esta vez han trasladado a sus protagonistas a un pueblo perdido «somewhere in South America». Somewhere off the map, hasta ahí habíamos llegado.
La trama de la nueva serie de la ABC está, por tanto, bastante clara. Es lo que vende, y es lo que nos vamos a encontrar, al menos en sus primeros episodios. Falta que la cosa se expanda un poco, pero además de tratamientos más o menos raros tipo ‘House’, parece que en ‘Off The Map’ lo que realmente importan son las relaciones entre los protagonistas. Un culebrón sudamericano -entiéndase la metáfora, que el producto viene de Norteamérica- no apto para los alérgicos al cliché.
Porque las cosas como son, la serie no es más que un tópico detrás de otro. Para que os hagáis una idea, hasta una pobre anciana con asma regala a la médico que la ha curado una gallina. Lo bueno de la serie, sin embargo, es que apela a nuestros más bajos instintos para que nos enganchemos: todos los personajes (planos a más no poder) han perdido algo, y se van al culo del mundo a redimirse y a empezar de cero a través de la falsísima excusa del altruismo. De verdad, ¿a nadie se le ha ocurrido contar la historia de los que hacen estas cosas de verdad, sin necesidad de escapar de nada? Porque eso sería ya la repanocha.
Calificación: 4/10
Destacamos: Los paisajes, y que los protagonistas -cómo no- están buenillos. Lo típico de la selva.
Te gustará si te gusta: Todos los engendros de Shonda Rhimes, desde ‘Anatomía de Grey’ hasta ‘Private Practice’, que para eso este también lo firma ella. Si te enganchaste a ‘Doctor Mateo’, igual también te va.
Predictor: Su estreno se cifró en más de siete millones de espectadores. A la semana siguiente, perdió dos. ¿Se irá a pique definitivamente?