Robin Gibb, vocalista y fundador de los Bee Gees, se ha recuperado favorablemente de cáncer de colon que sufría. El cantante ha asegurado que se encuentra bien y ha reconocido que la enfermedad le ha dado un nuevo impulso. «Me siento mejor que hace 10 años. Estoy activo, mi apetito es fantástico y todo está en perfecto estado (…). Así es como me quiero sentir, no podría sentirme mejor”, recoge el NME. Parece que el artista ha recuperado las fuerzas para el lanzamiento de su nuevo disco, inspirado en el hundimiento del Titanic y cuya publicación coincidirá con el centenario de la tragedia. Para ello, Robin ha contado con la ayuda de su hijo RJ y del tenor Mario Frangoulis.