Paco Loco suele levantarse muy temprano para ir a nadar, y después aprovecha para ir editando cosas, buscando ideas y tenerlo todo listo para empezar a grabar a las 9.30. Teniendo en cuenta que estamos hasta las 21.30 de la noche, cortando apenas una hora para comer, no nos podemos quejar mucho de la jornada de grabación que hace. Éste, entre muchos otros, es uno de los motivos por los que nos gusta tanto grabar con Paco: es un tío muy trabajador que se vuelca con el grupo.
Seguimos con baterías y percus. Ver grabar a un grupo es muy aburrido. Por eso no entiendo que nadie lo incluya como recompensa en su crowdfunding. Si no fuese porque es mi grupo, a mí tendrían que pagarme por estar aquí todo el día viendo grabar a otros.
Hoy hemos grabado las cuatro restantes que tenían percusión importante: ‘Marina’, ‘Algunas cosas…’, ‘Orfidal y caballero’ y ‘Hogareña’, una especie de rumba kraut con la que estamos muy a tope, aunque justo ahora que ha salido el disco de La Bien Querida con un rollo similar, ya no parece la idea más original del mundo. Pero creemos que también nos ha quedado bastante bonita. De las que hemos compuesto entre Javi (Betacam) y yo, fue la última en salir. Yo pasé todo el verano trabajando en la realización de un programa de flamenco, con lo que pasaba doce horas al día escuchando a El Cigala, Tomatito, Diego Carrasco o quien fuera que viniese a grabar ese día. Como soy un poco Zelig, todas las ideas que se me ocurrían por aquel entonces se fueron aflamencando poco a poco hasta que me descubrí rumbeando sin saber por qué (y sin ser yo nada de eso). Un día, volviendo a casa después de ensayar, Javi y yo veníamos hablando de que algunas canciones que teníamos no terminaban de convencernos, y me comentó que días antes había hecho esta especie de rumba kraut.