Top Shop estaba vendiendo una camiseta con una imagen de Rihanna sin permiso. La instantánea fue tomada por un fotógrafo freelance durante el rodaje de su «monster hit» ‘We Found Love‘, pero debido a la falta de permisos, la cantante pedía a la marca de ropa una indemnización de 5 millones de dólares.

El juez Birss ha considerado que un «número sustancial» de clientes ha podido comprar la camiseta bajo la falsa creencia de que se trataba de un lanzamiento oficial de Rihanna, por lo que se ha dado la razón a los abogados de esta, que decían que se «podía dañar la reputación de Rihanna en el mundo de la moda».

El juez no cree que la toma de una fotografía haya dañado la privacidad de Rihanna, pero sí que esta venta ha sido una «falsificación».

Desde Top Shop se han mostrado «atónitos» por la sentencia, según la BBC, alegando que la cantante ha vestido de Top Shop y ha tenido relación con la marca durante años.