Cualquiera que se acerque de manera casual a ‘Zaba’, el álbum de debut de Glass Animals, caerá en tópicos en los que es fácil caer si se está al tanto de la escena musical británica actual: se dirá con ligereza que son un calco de Wild Beasts, alt-J, etc. Pero tras horas de escucha y documentación sobre las ideas que subyacen en el disco, se entra de lleno en el mundo del cuarteto de Oxford, lo cual equivale a entrar en la cabeza de Dave Bayley (cantante, guitarra y compositor de la letra y la música de todos los temas, además de haberse encargado de la producción), llegando a apreciar la singularidad del proyecto y el hecho de que quede bien lejos de una burda imitación.
Es recomendable sumergirse del tirón en estos cuarenta y cinco minutos para adentrarse en el viaje que se nos propone y así poder disfrutar de los ricos detalles sonoros que rebosa esta producción. Además de ello y para situar los elementos sonoros en un contexto, al interesado en ‘Zaba’ le convendrá saber antes de comenzar que Bayley partió de ‘The Zabajaba Jungle’, libro infantil del autor William Steig, en el que se suceden múltiples imágenes ensoñadoras con la naturaleza como tema central, confluyendo fauna y flora. Otra cosa no, pero no se les podrá decir a Glass Animals que no son sesudos, pues decidieron parar la banda al poco de haberle dado forma para que cada miembro terminase sus estudios universitarios.
Con un fuerte componente electrónico que envuelve los instrumentos analógicos, en los once temas de ‘Zaba’ hay multitud de influencias (desde el dream pop hasta el trip hop, pasando por tintes jazz y r&b) que se reúnen junto a la rica producción de la que hablábamos (Bayley grabó diversos samples provenientes de lo que le rodeaba, desde el sonido ambiente de fuera de su casa hasta el sonido de animales mascando o percusiones hechas con utensilios de cocina). Todo suena como una elegante caricia, a veces con un ritmo que te puede levantar del asiento para hacerte bailar, pero siempre de una manera sutil y muy sensual, lo cual sí puede unirlos con los citados Wild Beasts, además del timbre vocal de Bayley, cercano en ciertos aspectos al de Hayden Thorpe. Las letras pueden pecar por momentos de ser demasiado crípticas, pero con el conjunto del álbum sucede lo mismo: sucesivas escuchas resuelven más y más misterios revelando detalles que se habían escapado: de una cierta indiferencia inicial y una caída en comparaciones demasiado obvias se pasa a una apreciación cada vez mayor de esta obra llena de momentos verdaderamente mágicos. Adéntrense pues. El viaje merece la pena.
Glass Animals actúan el sábado 2 de agosto (escenario playa, 23:50) como parte del cartel del Santander Music. El 22 de octubre están en La 2 de Apolo, Barcelona, y el 23 de octubre en Charada, Madrid.
Calificación: 7,8/10
Lo mejor: ‘Gooey’, ‘Black Mambo’, ‘Pools’, ‘Hazey’, ‘Cocoa Hooves’.
Te gustará si te gustan: Wild Beasts, Alt-J
Escúchalo: Deezer