Pocas cosas negativas se pueden decir de la banda de Louisville cuando, echando la vista atrás, nos han traído alegría tras alegría en forma de disco. Cierto es que el extraño ‘Evil Urges’ (2008), en el que se salían de su zona de confort probando con sonidos como el funk (aunque también con temas memorables) sería lo más parecido a una mácula en su excelente discografía, pero es pecata minuta si tenemos en cuenta el conjunto de grandes álbumes que han producido. Tras la aventura en solitario de su líder Jim James en ‘Regions of Light and Sound of God‘ (2013), en el que el elemento rock quedaba casi neutralizado, James vuelve a tener sed de guitarras y junto a sus chicos ha facturado canciones suficientes como para sacar dos álbumes, como así parece que va a suceder.
El primero de estos dos trabajos se titula ‘The Waterfall’ y es otra muestra del equilibrio que casi siempre acaban encontrando My Morning Jacket en sus LPs: el sonido clásico de la banda, entre la psicodelia y el rock de raíces americanas, sigue siendo la base de la que parten, pero lejos de oler a inmovilismo, revelan nuevas inquietudes. Las guitarras siguen suponiendo un elemento importante, junto con los sintes, órganos y juegos de voces y coros, pero esta vez ponen el acento en su faceta más ensoñadora, relajando el tempo y la distorsión y haciéndonos flotar de principio a fin, algo que puede tener su origen en el citado álbum de debut de James, con similares atmósferas.
Detalles técnicos aparte, ‘The Waterfall’ carece en absoluto de relleno, con diez canciones excelentes, con lo cual podemos constatar que superan con creces aquel pequeño bache de 2008 y dan digna continuación al notable ‘Circuital‘ (2011). Salen victoriosos en todos los frentes que atacan, comenzando por las risueñas ‘Believe (Nobody Knows)’ (sin lugar a dudas el momento más enérgico del álbum, un buen comienzo) y ‘Compound Fracture’, que por sus teclados recuerda un poco a los Genesis ochenteros, o siguiendo por la solemnidad y elegancia de ‘In Its Infancy (The Waterfall)’ y ‘Spring (Among The Living)’.
No dan puntada sin hilo y emocionan desde las alturas a las que nos elevan en los momentos épicos de cortes como la celestial ‘Like A River’ hasta con la sencillez de una balada acústica como ‘Get The Point’, demostrando que no tienen que enriquecer sus canciones para lograr comunicar algo con ellas. Por si esto fuera poco, rematan con ‘Only Memories Remain’, en la tradición de grandes canciones majestuosas como ‘Dondante’ o ‘Steam Engine’. La belleza y talento que contiene ‘The Waterfall’ hacen cuestionar si estamos ante el mejor trabajo de My Morning Jacket desde ‘Z’ (2005), pero de lo que uno ha de estar bien seguro es de que supone otro punto álgido de su carrera.
Calificación: 8/10
Lo mejor: ‘Like A River’, ‘Only Memories Remain’, ‘Believe (Nobody Knows)’, ‘Spring (Among The Living)’, ‘In Its Infancy (The Waterfall)’.
Te gustará si te gustan: Band Of Horses, Wilco, The War On Drugs, Ryan Adams
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