Si pensabas que Telecinco había tocado techo en nivel de cutrerío gracias a ‘Cámbiame’, lamentamos comunicarte que -según parece- queda camino por recorrer. Envalentonada por el éxito de ‘First Dates’ en Cuatro, la cadena ha presentado hoy un formato diario de media hora de duración (estimada, porque la tontería de hoy ha durado una hora entera) en el que seis concursantes reemplazables (imaginamos que por aquello de intentar hacer el concurso eterno) compiten para convertirse en el próximo influencer del mundo de la moda.
Todo lo que digamos del formato es poco. Desde una convidada de piedra en forma de Sara Carbonero (el mayor y único reclamo del programa) que aparece de vez en cuando por aquello de justificar su aparición en las promos; hasta un casting que parece sacado del peor descarte de ‘Hombres, Mujeres y Viceversa’, es imposible no flipar con el despropósito de una propuesta que, más que «el mayor talent show de moda del mundo», como se empeñan en definirlo sus responsables, parece una reunión de la comunidad de tu edificio con seis chonis gritándose, tirándose los trastos a la cabeza y participando en pruebas diseñadas por alguien con una edad mental no superior a tres años. Despropósito completo. 1.