Pet Shop Boys son el nuevo grupo invitado de nuestra sección «Buscando el mejor disco de», que ha culminado en este caso con resultados poco ortodoxos. El álbum elegido como mejor álbum de la carrera del grupo, y el único con una media superior a 9/10 es ‘Introspective’ (1988), una especie de cúmulo de canciones como en versión maxi, de portada muy icónica, y con singles como ‘Left to My Own Devices’, ‘Always on my Mind’, ‘Domino Dancing’ o ‘It’s Alright’ que definían la música dance de finales de los 80 y de principios de los 90.
Aunque Carlos Úbeda prefiere personalmente ‘Actually’ lo defiende: «Todo lo contenidos que estuvieron en muchos momentos de ‘Actually’ lo soltaron aquí. Durante mucho tiempo pareció un disco raro, con muy pocas canciones y muy largas, como de remixes, que no eran exactamente iguales a las versiones de la radio. Pero, una vez aceptado eso, me parece de lo mejor que han hecho, un pepinazo tras otro. Confirma su mejor etapa». En segundo lugar queda precisamente ‘Actually’ (1987). Úbeda habla de sus canciones capitales: «‘Rent’ es una de mis canciones favoritas de todos los tiempos, pero es que prácticamente todas son excelentes, desde la expresividad de ‘It’s a Sin’ a la melancolía de ‘King’s Cross’, pasando también por otras canciones menos populares: ‘Shopping’, ‘Hit Music’… Y para rematar, Dusty Springfield en una soberbia composición», culmina refiriéndose a ‘What Have I Done to Deserve This?’.
Consciente de que ‘Behaviour’ (1990), en el tercer puesto de nuestro ránking, está tradicionalmente considerado el mejor álbum de Pet Shop Boys, Carlos defiende su nota más moderada: «Es su disco más melancólico y el más mimado por la crítica. Unánimamente está considerado su mejor trabajo. No estoy de acuerdo, aunque me parece muy bueno por ‘Being Boring’, claro, y también por ‘Jealousy’ o ‘So Hard’, por ejemplo. Sin embargo, algunas canciones me empiezan a aburrir un pelín». Lolo Rodríguez coincide en esto último y en el exceso de baladismo: «Mientras reescuchaba la discografía de los Tennant y Lowe, cada vez que empezaba ‘Behaviour’ después de ‘Introspective’ no podía evitar un bajón considerable que solo conseguía levantármelo ‘So Hard’. Sé que las letras son preciosas, pero es que casi me parece un disco de nanas». En cambio, Mireia se muestra entusiasmada: «‘Behaviour’ es más, mucho más que ‘Being Boring’. Es un disco sobre pérdidas y melancolía, sobre hacerse mayor y despedir para siempre a la gente querida; sobre amar, anhelar; el pasado del que queremos huir y nos persigue… Su cara B, de ‘My October Symphony’ a ‘Jealousy’ puede ser perfectamente el conjunto de canciones que más me emociona de la historia. Una de las cimas del POP. Así, en mayúsculas».
La gran campanada del ránking viene de la excelente posición conseguida por ‘Electric’ (2013), un meritorio cuarto puesto, que varios años después de su edición ya no podemos asociar a su hype. Lolo lo defiende: «A mí la parte que más me interesa de PSB son sus coqueteos con la electrónica más dura, así que no cabe duda del motivo por el que este disco me vuelve absolutamente loco. Recuerdo que cuando lo escuché por primera vez pensé: «¿estos cabrones no van a dejar de hacer trallazos nunca?». Un canto al hedonismo, a pasárselo bien en una discoteca y la demostración auditiva de que se puede seguir sonando moderno a los taytantos». Carlos Úbeda coincide: «La gran alegría de los PSB tardíos. Solo un poco después del anterior, los Pet Shop Boys inauguraban su propio sello con este discazo. Tan bueno que llevó a muchos a pensar si se habían estado reservando canciones. Más sintético y kraftwerkiano que nada que hubiesen hecho antes, para mí está entre sus 3 mejores discos de toda su discografía. Mantiene casi todas sus constantes: versiones, sampleos, recitados desapasionados. ‘Thursday’ o ‘Love Is a Bourgeois Construct’ son ya clásicos por derecho propio. Me sigue maravillando».
El quinto puesto es para ‘Very’ (1993), que recibe un 10 de Mireia Pería: «Como el reverso juguetón de ‘Behaviour’, Pet Shop Boys juegan a ser más PSB que nunca en un disco adhesivo, bailable y technicolor, en el que entre la alegría sintética trufada de mala uva (‘Can You Forgive Her?’, ‘Yesterday, When I Was Mad’) también cabe el retrato social (‘The Theatre’) o la amargura (‘To Speak Is a Sin’), coronado por ese himno que es ‘Go West’. Sí, la humanidad se dedicará a cantarla cual himno futbolero, pero es de una tristeza infinita. Jamás llegaremos al oeste…». Carlos Úbeda lo defiende sin tanto entusiasmo: «Es el primer disco de PSB del que tengo recuerdo de su publicación. Por entonces eran ya muy famosos incluso en España y hasta un niño como yo sabía quiénes eran. Por ello y por el éxito de la versión de ‘Go West’, siempre había asociado ‘Very’ con el comienzo de los Pet Shop Boys noventeros, ya mainstream. Sin embargo, a lo largo de los años he reescuchado ‘Very’ y cada vez me gustaba más. Hoy en día lo veo más cercano a sus discos clásicos de los 80 que a lo que vendría después. Además, escuchando cosas como ‘A Different Point of View’ me parece que no ha envejecido nada mal». Raúl Guillén, por contra, le da una de las calificaciones más bajas: «No puedo con ‘Go West’, lo siento. Pero es que además me parece que este álbum es muy inconsistente, temas algo taciturnos que no impactan. Lo veo como un disco de transición, pese a su éxito».
También excelente el puesto que ocupa el nuevo disco del grupo, editado este mismo año, ‘Super’ (2016), y producido como ‘Electric’ por Stuart Price (Madonna, Les Rhythmes Digitales, The Killers). A Úbeda le emociona mucho menos, pero aun así lo defiende: «‘Super’ sigue la estela de ‘Electric’, pero es más dance, más hortera, más popero. Como un familiar más desinhibido. Eso le hace perder cierto halo de perfección, de «gran disco», pero no deja de hacerlo disfrutable. Además, confirma que la sorpresa de ‘Electric’ ha dado definitivamente un nuevo empuje a su carrera». Sebas E. Alonso lo defiende un poco más entusiasmado: «Todos los discos de Pet Shop Boys tienen canciones que me gustan y canciones que no me gustan. Este es un poco más chabacano y zapatillero, pero es que hay muchas canciones que deberían estar petándolo: ‘Burn’, ‘Undertow’, ‘Say It To Me’, ‘Groovy’, ‘The Pop Kids’ y por supuestísimo ‘Twenty-Something’ suman hasta 6 singles potenciales. Para mí eso es decir que esta sí es una de sus mejores obras».
Este furor por su última etapa deja nada menos que en 7º lugar el debut de Pet Shop Boys, que incluía maravillas como ‘West End Girls’ o ‘Suburbia’. Carlos lo justifica: «De los discos buenos de PSB, quizá es el que menos me gusta. Me encanta ‘Opportunities’, pero no tanto ‘West End Girls’ o ‘Suburbia’ aunque, a fuerza de escucharlas me han acabado emocionando. Especialmente porque lo innegable es que ya marcan el canon de lo que serán las grandes canciones de PSB».
‘Bilingual’ (1996) recibe aún una media de notable en lo que Carlos Úbeda considera «los Pet Shop Boys noventeros» de verdad. «Creo que acertaron con todo el rollo de Brasil, la batucada y demás. Gracias a eso este disco consiguió impactar en la memoria de muchas personas». Eso sí, también afirma: «Sin embargo, hay demasiado relleno medio housero que anuncia cierta pérdida de inspiración. Pese a ello, concepto bueno, singles buenos… todavía vuelan alto». Mireia lo defiende a saco: «Me chifla ‘Bilingual’. Es un disco como con dos mitades claras; una primera parte «brasileña», desde el demoledor inicio de ‘Discoteca’ pasando por el hit que fue ‘Se a Vida É’, una segunda de techno-pop más marca de la casa (‘Before’ es maravillosa). Siempre me ha dado la sensación de que en este disco Neil y Chris se relajaron e hicieron lo que les vino en gana. Y el resultado destila un savoir faire muy especial».
Por encima de 7 y con una media muy parecida encontramos ‘Fundamental’ (2006) y ‘Yes’ (2009), los álbumes que se editaron tras el perfecto recopilatorio ‘PopArt’, que además de los excelentes singles de su carrera añadía el imprescindible inédito ‘Flamboyant’. Sebas E. Alonso defiende ambos por igual: «No veo estos dos discos tan alejados de lo que se consideran sus obras maestras ni de sus dos últimos álbumes. ‘Fundamental’ incluye ‘Integral’ y ‘Minimal’ y ‘Yes’ traía ‘Love Etc’, ‘Pandemonium’, ‘All Over the World’, ‘More Than a Dream’ o ‘The Way It Used To Be’. Es verdad que ambos traían canciones nada reivindicables y bastante aburridas, pero los singles de Pet Shop Boys también estaban muy marcados en ‘Actually’, en ‘Behaviour’ y en ‘Very’. No era ninguna sorpresa. A mí estos dos fueron los álbumes que me devolvieron la fe y los responsables de que siga escuchando a Pet Shop Boys. Otro gallo habría cantado si hubieran continuado sacando «Releases»».
Carlos Úbeda comparte esta opinión pero con un tono más moderado. «Aprovechando que muchos grupos reivindicaban su sonido clásico y que otros compañeros de generación volvían a las raíces, los Pet Shop Boys se apuntaron a un cierto revival de su etapa más reconocible. ‘Fundamental’ no está mal, es mejor que los anteriores, pero es en ‘Integral’ (que, hoy en día parece casi un adelanto de ‘Electric’), donde me convencen plenamente, donde creo que pulsan la tecla adecuada». Puntúa casi con la misma nota ‘Yes’: «Algunos medios se vinieron muy arriba con este disco. No creo que fuera para tanto, pero creo que confirma la mejora iniciada en ‘Fundamental’, quizá algo menos forzada».
Ya por debajo de 7 encontramos ‘Nightlife’. Para Carlos Úbeda «aquí se inicia la auténtica decadencia. Una decadencia digna, como todo en Pet Shop Boys, donde pueden hacer cosas como ‘I Don’t Know what I Want…’, pero que me hizo perder el interés». Con todo, tiene en Lolo Rodríguez y Raúl Guillén dos fervientes defensores. «La verdad es que lo recordaba peor. Recuerdo haberles visto en el Palacio de los Deportes con esta gira y, quizá de escucharlo tanto para aquel concierto, me he sorprendido recordando cada tema del álbum. Eso ya me ha dado mucho subidón», dice Raúl. «Pero ojo, que no es solo nostalgia: ¿acaso no son temarracos ‘You Only Tell Me You Love Me When You’re Drunk’, ‘I Don’t Know What You Want But I Can’t Give It Anymore’ o ‘New York City Boy’?», concluye. Y casi empatado en puntos, ‘Elysium’, si bien Úbeda muestra una opinión particular: «Es un ligero bajón, pero este intento de disco elegante no me parece tan inferior a ‘Yes’ como se comentó».
Como muestra de que los Pet Shop Boys más tranquilos no son los favoritos de la redacción con la salvedad de ‘Behaviour’, por supuesto el último puesto lo ocupa el aburridillo ‘Release’ (2002). «La adultez como reconocimiento de la decadencia. Canciones más lentas y acústicas, himnos agradables. Todo muy correcto, pero también muy vacío», indica Carlos Úbeda. Solo Lolo Rodríguez defiende el disco a capa y espada: «Nunca he entendido la aversión generalizada que produce ‘Release’. Si bien mis discos favoritos de PSB son los bakalas, me resulta imposible resistirme a este disco de baladones. ‘Home & Dry’ es una de mis canciones favoritas de todos los tiempos del dúo británico; me emociono siempre que escucho el final de ‘Birthday Boy’ o las letras de ‘Love Is A Catastrophe’ o ‘London’ y siempre que estoy triste me falta tiempo para ponerme ‘I Get Along’. What’s not to like?
Mireia destaca también algunos lanzamientos paralelos, en especial sus discos de «remezclas». Considera ‘Disco 1’, «un clásico, por lo menos para los que nos hicimos fans en los 80. Remixes míticos de ‘Suburbia’ o ‘In the Night’» y directamente ‘Disco 3’, «uno de sus mejores álbumes, categoría absoluta. Parten de ‘Release’ y fabrican una estupenda revisión “makinera” y hedonista (el remix de ‘Here’ es espectacular). A reivindicar (¡y a bailar!)». En cambio no hay tan buenas palabras para ‘Disco 2’: «Aún me entran sudores fríos cuando recuerdo el Rollo Dub de ‘Can You Forgive Her?’. He sido incapaz de volverlo a escuchar desde 1994».
También valora la banda sonora realizada para ‘El acorazado Potemkin’ («La fascinación de Neil Tennant por la historia de la URSS cuajó en la BSO del clásico de Eisenstein. Curiosa, algo encorsetada y con momentos emocionantes (‘No Time for Tears’)») y ‘The Most Incredible Thing’: «A palo seco, sin poder ver el ballet al que acompaña, esta BSO resulta aburridísima y bastante pobre. Solo destaca el breve momento en que suena la pegadiza ‘Baby’».
Carlos Úbeda | Farala | Mireia Pería | Raúl G. | Sebas E. | Ránking | |
---|---|---|---|---|---|---|
Please (1986) | 7,5 | 7 | 7,8 | 7,7 | 8,5 | 7º |
Actually (1987) | 9,5 | 7,5 | 10 | 9 | 8,5 | 2º |
Introspective (1988) | 9 | 9 | 9,6 | 10 | 8,5 | 1º |
Behaviour (1990) | 8,2 | 7,5 | 10 | 9 | 8,5 | 3º |
Very (1993) | 8 | 7,5 | 10 | 6,8 | 8 | 5º |
Bilingual (1996) | 6,9 | 7,5 | 8,5 | 8,4 | 6 | 8º |
Nightlife (1999) | 5 | 8 | 6,2 | 8 | 7 | 11º |
Release (2002) | 5 | 8,5 | 5,6 | 6 | 6 | 13º |
Fundamental (2006) | 6,1 | 9 | 5,8 | 7,5 | 7,5 | 9º |
Yes (2009) | 6 | 8,5 | 6,8 | 6,8 | 7,5 | 10º |
Elysium (2012) | 5,8 | 6 | 7,7 | 7 | 7,5 | 12º |
Electric (2013) | 9 | 10 | 7,5 | 8 | 8 | 4º |
Super (2016) | 7 | 8,75 | 8 | 7,8 | 8 | 6º |