Biznaga / Sentido del espectáculo

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Biznaga / Sentido del espectáculo

biznaga_sentido-del-espectaculo‘Centro dramático nacional’, el debut del cuarteto madrileño Biznaga, ya supuso un sonoro primer aviso. Y ‘Sentido del espectáculo’, su segundo álbum y que cuenta con el respaldo de un sello internacional que les ha abierto el mercado americano, es ya una detonación en condiciones, ante la que solo podrás agachar la cabeza e ignorarla si eres tibio de espíritu. Bajo la mano experta de Kaki Arkarazo (al que supongo que habrán acudido más por sus trabajos en Kortatu y Negu Gorriak que con Chucho o Manta Ray), Biznaga se muestran en estos 11 cortes escupidos en menos de media hora desafiantes, incendiarios y agresivos.

Biznaga se miran en el punk urgente de The Clash, Buzzcocks o TV Personalities, pero tanto como en el punk-rock urbano de mediados de los 80 en nuestro país: Ilegales, Eskorbuto, Parálisis Permanente. Comparten con ellos estética pero además, de forma aterradora, su palabra, aunque actualizada, evidencia no ya el inmovilismo sino la involución social que nuestro país vive. Porque la idiotización, el aislamiento, la ausencia real de oportunidades, la violencia como única forma de expresión solo han cambiado de apariencia, pero no del fondo. El rock de Biznaga, en todo caso, más que denunciar o protestar, retrata, con certera, ilustrada y violenta precisión, una realidad a duras penas tamizada por filtros de Instagram y emoticonos: calles negras como la etapa negra de Goya, con olor a orín y basura, con trapicheos y personajes semiocultos que miran con desconfianza, y la tensión a punto de estallar. Si el rap de El Coleta resucita la kinkixploitation de los filmes de Eloy de la Iglesia, Biznaga parecen recrear en los alrededores de Montera, Tres Cruces y Ballesta la mugre física y moral de los primeros filmes de Imanol Uribe o Montxo Armendáriz.

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Desde el adelanto ‘Mediocridad y control’, que abre impetuosa el disco, al cierre con la oscura ‘El mal de Aurora’ (evocación de la obra del Conde de Lautréamont), se suceden sin respiro, como una somanta de bofetones, canciones urgentes que encienden ánimos con su lenguaje y unas melodías realmente irresistibles, tan volcánicas como ‘Jóvenes ocultos’ (bárbara en su coda), ‘Una ciudad cualquiera’, ‘Nigredo’ , ‘Héroes del no’, ‘Oficio de tinieblas’ o ‘Una nueva época del terror’, que (como les gusta tanto señalar a ellos mismos) no hacen ascos, si procede, al folclore patrio. ‘Sentido del espectáculo’ es una invitación difícil de declinar al pogo, claro, pero igualmente agita con ímpetu nuestros adormecidos espíritus críticos. Bailemos, despertemos.

Calificación: 8,2/10
Lo mejor: ‘Jóvenes ocultos’, ‘Una ciudad cualquiera’, ‘Mediocridad y confort’, ‘Nigredo’, ‘Héroes del no’
Te gustará si te gustan: Juventud Juché, Parálisis Permanente, Ilegales, Buzzcocks
Escúchalo: Spotify, Bandcamp

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