Hace muchísimo frío y ya han encendido las luces de Navidad: no es tan mala idea que Carla Bruni saque un disco de versiones. Al fin y al cabo, ¿qué nos puede afectar más ahora mismo que su escalofriante interpretación de ‘Le ciel dans une chambre’? Sin embargo, varias cosas lastran este disco de revisiones de la cantante producido por David Foster. En primer lugar, la selección de canciones es demasiado evidente: están canciones tan sobadas como ‘Enjoy the Silence’ de Depeche Mode, ‘Perfect Day’ de Lou Reed o ‘Crazy’ y cuando aparece la trilladísima ‘Moon River’ para cerrar, el «eye rolling» ya es inevitable. En segundo lugar, aunque la producción es correcta, con ese piano para el clásico de Depeche, el ritmillo bailable de ‘Crazy’ con Willie Nelson o la guitarra eléctrica muy en segundo plano para la revisión de AC/DC, Bruni parece haber querido despojar de tanto a las canciones, que a veces las ha dejado sin su mismísima alma. Y por último, ese «French Touch» que aparece en el título no termina de asomar por ningún lado: ¿en qué Francia estarán pensando si desde luego no es la de Daft Punk pero tampoco la de Hardy y Gainsbourg? Vamos por el quinto disco de Carla y su formidable debut cada vez es un punto más lejano en el horizonte…
Calificación: 4/10
Lo mejor: ‘Please Don’t Kiss Me’, ‘Stand By Your Man’
Te gustará si: adoras su voz y te da igual lo que cante
Escúchalo: Spotify