“¿Hasta dónde estarías dispuesto a llegar por tu hijo?” es la pregunta que nos lanza el eslogan de ‘Tu Hijo’… pero realmente ésa no es la pregunta que nos hace la nueva película de Miguel Ángel Vivas. O, al menos, no la única. Es una pena que la saga de ‘Venganza‘ venga (jé) a la mente de muchos cuando lean la sinopsis o vean el trailer, porque no tienen nada que ver, y probablemente eso espante a más de uno: si es tu caso, te recomiendo que entres a ver esta historia sin prejuicios (y que evites a toda costa los spoilers como si esto fuese ‘Perdida‘), porque te vas a sorprender mucho. Y para bien. Jaime (José Coronado) es un médico padre de familia cuya vida da un giro de 180º cuando su hijo (Pol Monen) recibe una brutal paliza que le deja en coma y, desesperado al no encontrar respuestas ni justicia, decide buscar ambas con sus propias manos… de forma cada vez más literal. Pero esta producción de La Claqueta y Apache Films no tiene en ningún momento la pretensión de convertir a José Coronado en un Liam Neeson patrio, ni en emular los papeles de héroe/antihéroe de acción que tan bien defiende el madrileño; es otra la historia que quiere contar el guión escrito por Vivas junto a Alberto Marini.
¿Y qué quiere contar? Vivas, que describe el film como “una crítica a la masculinidad mal entendida”, define a su protagonista como un hombre del s. XX que no ha comprendido el s. XXI: “y el problema es que hay una serie de personas con cargos importantes en la misma situación… en realidad, ninguno de nosotros ha superado el s. XX, esa herencia está ahí”. No es casualidad que la película interpele tanto al espectador: desde el mismísimo título hasta la interpelación ya literal que, en el preestreno de Sevilla, el director hizo a los hombres presentes entre el público. “Jaime sois vosotros”. Porque, sin desvelar giros, la llaga donde Miguel Ángel Vivas mete el dedo no es tanto el hecho de que un padre podría hacer de todo por su hijo (que también), sino hasta qué punto los padres conocen a sus hijos, qué valores les transmiten a sus hijos, qué valores tienen a la hora de la verdad… y aquí es donde entran los valores asociados al constructo tóxico de masculinidad. Esa masculinidad que te hace reprimir tus emociones (“no te he visto llorar”, le dice el personaje interpretado por Asia Ortega) hasta que se enquistan y salen, como el pus, cercanas a la putrefacción. Por todo esto tiene un sentido la que podría ser una de las principales críticas al film -y que, sin duda, en otro contexto lo sería-, la poca presencia de las mujeres: se puede pensar que Ana Wagener está desaprovechada (eso sí, en las pocas ocasiones en que sale, está fantástica), y que en general los personajes femeninos de la película adoptan un papel sumiso, casi la “lámpara con post-it” del famoso test, frente a la abundante toma de decisiones y a las acciones de los personajes masculinos. Peeeero es que esa es la cosa: todo esto tiene un sentido simbólico con el final, y ya se encargan de dejarnos guiños en las primeras secuencias que comparte Jaime con su hija y su esposa.
Por supuesto, Coronado es el principal “culpable” de que ‘Tu Hijo’ sea el peliculón que es, con una de las interpretaciones más brutales e interesantes de su carrera. Una interpretación llena de detalles y basada mucho más en los crescendos y en la sutilidad -decidme que no le estaba dando una hostia con la mirada al dueño de la discoteca- que en lo excesivo. El prometedor (realmente podemos quitarle ya ese adjetivo, ¿no?) Pol Monen también hace un estupendo y complicado trabajo, tanto por las pocas escenas como por las energías tan distintas que debe transmitir, y ambos actores consiguen una química padre-hijo real y hasta tierna (el barcelonés comentaba en una entrevista que la intención era evitar que quedase pastelosa, y lo han conseguido). En cuanto al resto del reparto, de Luis Bermejo poco hay que decir a estas alturas, y los más jóvenes también están a ala altura de lo requerido: Asia Ortega especialmente natural, Sergio Castellanos demuestra que lo visto en ‘La Peste‘ no fue un espejismo, y de Ester Expósito no me sorprendería una nominación al Goya como mejor actriz revelación.
La otra gran baza de ‘Tu Hijo’ es la construcción de una atmósfera cada vez más asfixiante, a lo que contribuyen los planos secuencia, el acertado uso de la música, la importancia (de nuevo) de los detalles en aspectos tan tontos y a la vez tan cruciales como cierto bloqueo del móvil, un guión que nos hace empatizar y sufrir con Jaime a cada putada que se le presenta, o los desenfoques del resto del plano cuando le seguimos. Vivas ya demostró su habilidad para mantenernos en tensión con ‘Secuestrados‘, pero aquí se supera, entregando una película que evidentemente no es perfecta (un ejemplo es el tema del acento neutro en plena Sevilla, no ya con la familia de Coronado, sino con muchos otros personajes, que te acaba sacando de la escena), pero que resulta su mejor película, y una de las mejores propuestas nacionales que se pueden encontrar actualmente en cartelera. Y cuya pregunta no es solo hasta dónde estarías dispuesto a llegar por tu hijo, sino qué valores puedes estar transmitiéndole sin darte cuenta. Y qué tipo de mundo quieres dejarle. 8.