Cuando hablamos con varios artistas para averiguar de qué manera les estaba afectando económica y anímicamente la pandemia, Sandra Delaporte nos avanzó que preparaba un proyecto especial en apoyo de las mujeres en la industria musical. Ese proyecto se llama ‘Titanas’ y en él Delaporte revisitarán en compañía de 7 mujeres artistas de primera línea 7 canciones de su notable último álbum, ‘Las montañas’. Esas artistas son, en riguroso orden alfabético, Amaral, Anaju, Belako, Dora, Rigoberta Bandini, Rozalén y Zahara. Con motivo del Día de la Mujer Trabajadora, se ha presentado el primer tema colaborativo, ‘Las montañas’ junto a Eva Amaral. Foto: Jaime Massieu.
Tiene todo el sentido que este proyecto se relance en un día como hoy, pues todo el disco ya hablaba de cuestiones como el acoso y los abusos, como nos contaba Sandra Delaporte en otra entrevista anterior, apelando al «patriarcado»: «Me puse a escribir las letras, cada una a su tiempo, y una vez visto el puzzle desde arriba al final, me di cuenta de que estaba hablando de que he tenido que hacer un proceso personal con una psicóloga para ser un poco más feliz. Y para eso tuve que entender que sentía opresión, sentía que no era yo, que había fuerzas que están, que se normalizan, que están ahí, nacen, crecen, convives con ellas… pero te hacen crecer de una manera que no eres feliz porque no eres tú. Y esa opresión es básicamente patriarcal. Estar en un prueba de sonido y que hablen con Sergio porque piensan que es quien tiene criterio, que yo soy la que no sabe de nada. Enfrentarme a caminar por la noche con miedo a sufrir acoso. Ex parejas para las que no eres suficiente, que eres tonta, que no puedes producir, que vas a ser la cara del grupo y ya está. No hay un hecho palpable como tal de haber sufrido una violación, un insulto racista u homófobo. Son minitraumas a la espalda, que te hacen crecer mal, no crecer como a ti te hace feliz, que te hacen dudar de lo que eres y tienes. Sin querer, todo eso salió de golpe, todos esos obstáculos salieron de golpe y salió así. Todas esas formas de intolerancia, normativas de cómo tiene que comportarse una mujer, o un hombre, por la masculinidad tóxica. Dije: «no puedo más», y ha quedado así. El objetivo de un artista es decir lo que es, de la mejor manera posible».
Particularmente, la canción ‘Las montañas’ era, valga la redundancia, la cumbre del álbum, pues es la canción que cerraba potenciada por un impresionante vídeo de Eduardo Casanova, y ahora su sentido se amplifica con la colaboración de Eva Amaral. Esta aparece en un registro más agudo, acercándose al gusto de Sandra por el tono Kate Bush, y a veces mimetizándose con ella. De no ser porque hay videoclip nuevo (grabado siguiendo el protocolo covid-19), en ocasiones cuesta averiguar quién está cantando de las dos, sin que sus voces se parecieran de antemano. Con la intervención de Juan Aguirre, que también tiene su parte de «featuring», el tema adquiere un tinte más orgánico.
La nota de prensa del proyecto indica que esta canción de Delaporte en particular emociona sobremanera a Eva Amaral, que explica: «La primera vez que la escuché rompí a llorar; fue muy emocionante que me invitaran a cantarla con ellos”. Eva explica que se unieron a este proyecto por una cuestión de sororidad: “Pretende romper muchos estereotipos machistas acerca de la competitividad entre las mujeres. Pone en relieve empoderar el sentimiento que hay de solidaridad entre nosotras, en la música y en la sociedad en general”.
Por su parte, Sandra añade: “Cuando escribí el disco ‘Las Montañas’ lo hice desde una motivación personal, de una necesidad de hacer piña y de superar obstáculos que, al analizarlo, me di cuenta que vienen de hace siglos de patriarcado. Las mujeres del proyecto nos queremos libres, fuertes y tenemos en común lo mismo: luchar para sacar adelante nuestra palabra, nuestra música en una industria históricamente protagonizada por hombres. Para que surjan más mujeres artistas y músicas es imprescindible que existan referentes femeninos. Cualquier cosa que suponga un apoyo a cambiar esto es un avance hacia la igualdad».
Las otras colaboraciones con Zahara, Anaju, etcétera, se darán a conocer a lo largo de los próximos meses. Una manera muy original de revitalizar un proyecto que no puede promocionarse adecuadamente de gira a causa de la pandemia, pero que permanecerá vivo durante las próximas semanas. Y es que si Sandra parecía una de las artistas más desanimadas en el referenciado reportaje de «músicos y pandemia», debido a la crisis económica del sector, sin duda ha encontrado una manera de motivarse y motivar al resto.