Se cumplen 25 años del estreno de ‘Abierto hasta el amanecer’, la película que abrió las puertas de Hollywood a Robert Rodríguez y George Clooney (famoso en esos momentos por la serie ‘Urgencias’), convirtió a Salma Hayek en una sex symbol, y provocó que Quentin Tarantino dejara de una vez por todas la interpretación (fue nominado a los Razzies) y se dedicara a lo que mejor sabe hacer: escribir, dirigir y hacer algún cameo gracioso de vez en cuando.
El videoclip ‘La fama’ rinde homenaje al filme de Rodríguez, en concreto a la célebre secuencia del baile erótico de Hayek con la serpiente. Comienza igual, con el actor Danny Trejo (quien luego protagonizaría el díptico ‘Machete’ del propio Rodríguez) presentando a la bailarina. La diferencia estriba en el escenario y en la naturaleza del baile.
En cuanto a lo primero, del tugurio “La teta enroscada” de la película pasamos a una sala de baile mucho más elegante, en sintonía con el tema de la canción. Mesas con cubiertos de plata y platos con “lonchas” de diamantes. Una metáfora visual directamente inspirada -¿fusilada?- en la obra ‘Addicted to Diamonds’ (1997), de David LaChapelle.
En cuanto al baile, lo que hacen Rosalía y The Weeknd es algo así como la versión higiénica, inofensiva y tontorrona de la danza erótica de la Hayek. En vez de comerse el pie de Rosalía como hace Tarantino en el filme, The Weeknd (abrigado como un vagabundo) se limita a mirarla embobado. Y en vez de una serpiente, Rosalía se saca (de la manga) una daga con la que apuñala al cantante.
La posterior actuación de The Weeknd haciendo que agoniza en el suelo la podemos interpretar de dos maneras: 1) como un homenaje a la mala actuación de Tarantino en la película, y 2) como la constatación de que el interés que ha puesto el realizador Director X en el rodaje de ‘La fama’ es el mismo que ha empleado Pablo Casado en enterarse de cómo funciona la energía solar.