Vau Boy y Keyblade son dos jóvenes creadores de nuestro país. El primero, nacido en Zaragoza y ahora instalado en Madrid, autodidacta desde pequeño, se ha inspirado en la electrónica europea, la estética de las raves e internet. Ha colaborado lo mismo con Cascada (!) que con Pipiolas y también ha realizado bandas sonoras con juegos de ritmo. En cuanto a Keyblade, cuenta con 6 millones de suscriptores en Youtube, y se define «más como un mastodonte del entretenimiento en internet que como un nerdcore rapper». Es graduado con Comunicación Audiovisual y tiene un poemario en ciernes.
Juntos han publicado este mismo mes un EP, tras varias colaboraciones como ‘Whoever’, que ronda el medio millón de streamings. El EP se llama ‘PLANETA CORAZÓN’ y lo presentan este viernes 24 de junio en el Maravillas Club de Madrid. Se trata de uno de los conciertos de la programación de Escenarios Vibra Mahou, que cada vez se abre a más estilos, y además en este caso les acompañará Jeidi Mel.
El EP de 4 canciones que Vau Boy y Keyblade han publicado este mes de junio viene encabezado por un tema llamado ‘Las chicas me ignoran’, muy gráfico desde su primera línea: «ya no sirve Tinder ni salir de copas (…) las chicas me ignoran». Es muy loable que la propia nota de prensa que los presenta alerte de sus «letras ñoñas y divertidas a partes iguales», muy consciente de que en el proyecto pasan tantas cosas que pueden permitirse el lujo de reírse de eso.
Y no me refiero a la cultura pop propia de la generación Z que emana de esta letra, como según ellos mismos apuntan «el meme de la gótica culona, Ramona Flowers o Pokémon». Es que, como presumen, Vau Boy y Keyblade le pegan lo mismo al tontipop que al reggaetón o al punk pop a lo largo de estas 4 nuevas canciones.
Si ‘Barbecho’ mete de repente un saxo, atención a ‘Mañana me pongo’, que no sabemos si es una producción de reggaetón realmente o una canción con la cadencia exacta de un hit de Chainsmokers… ¡o un tema de hyperpop! Seguramente le hayan pegado lo mismo a Pignoise que a SOPHIE, como parecen dejar caer en esos vídeos, sí, tan generación Z.