Maggie Rogers acaba de publicar su segundo álbum, ‘Surrender‘, en el que apuesta por un sonido más guitarrero inspirado en el pop-rock de los años 90. Un sonido acorde a los sentimientos de pasión y liberación que narra en las letras.
El disco ha contado con varios singles, entre los que se encuentra el hitazo de ‘Want Want’ y también un tema más sutil, menos explosivo, pero igual de emocionante, en el que vale la pena detenerse. ‘Horses’ es la Canción Del Día de hoy.
‘Horses’ presenta varias formas. En las estrofas es una canción folki de hoguera, pero en el estribillo adopta un sonido de pop-rock crudo que incluso tiene un poco de post-punk. En las estrofas, Maggie canta de manera íntima. En el estribillo lo hace a pleno pulmón.
Ambas formas de ‘Horses’ configuran una de las mejores canciones de la carrera de Maggie. La melodía de las estrofas conmueve en su sencillez y la del estribillo le sirve para exorcizarse. Canta que quiere ser tan libre como los «caballos» mientras reflexiona sobre la vida, su pareja, los pájaros o los sueños.
Llaman la atención varios pasajes. Maggie recuerda una escena en que su pareja le practica cunnilingus, pero lo hace en una melodía que podría hacer llorar a cualquiera. Y cuando se pone poética le salen versos tan bellos como esos dedicados a los sueños, que son un «sentimiento que te encuentra en el medio de lo que quieres y de lo que realmente necesitas».
Maggie ha explicado que ‘Horses’ va sobre «dejar ir, sobre querer sentirme libre en un momento en que me abrumaba al sensación de no poder sentir nada». La artista ha declarado que, para ella, ‘Horses’ es una canción «sagrada». Se entiende el porqué.