Según ha informado NBC News, tres ex bailarinas han presentado una demanda contra Lizzo. Acusan a la cantante de acoso sexual, de crear un ambiente de trabajo hostil, acoso religioso, racial y, además, de regañar a una de las bailarinas por su aumento de peso.
La demanda la ha recogido el Tribunal Supremo de Los Ángeles, y según NBC News, no solo denuncia a la cantante de ‘About Damn Time’. También aparece el nombre de la jefa del equipo de bailarines, Shirlene Quigley, a quien culpa de atacar las creencias religiosas de otros componentes del equipo. Presuntamente, también compartía sus fantasías sexuales, simulaba practicar sexo oral y hablaba de la virginidad de una de las demandantes.
En la denuncia se tratan algunos episodios más: supuestamente Lizzo presionó a las demandantes para tocar a strippers desnudas en un club de Ámsterdam y se las sometía a acoso religioso y racial. La denuncia se hace a tres personas: a Lizzo, a la jefa de bailarines Shirlene Quigley y a la productora de la artista.
A dos de las tres ex bailarinas las despidieron en 2021 (poco despúes de empezar a trabajar con Lizzo), según ha informado NBC News. La tercera demandante, comenzó en el mismo año, pero no ha sido hasta ahora cuando ha renunciado.