Desde que Nueve Desconocidos se dio a conocer allá por 2021, el proyecto de post-punk y darkwave del valenciano Ares Negrete ha publicado dos interesantes discos entregados a la oscuridad, ‘Primer disco de Nueve Desconocidos llamado Nueve Desconocidos‘ (2021) y ‘Toque de ánimas‘ (2023). ‘Gremlin’, ‘Todos mis cristales’, ‘Llagas, ‘Soledad’ o ‘Preguntas’ junto a El Último Vecino han creado un universo propio en el que también ha cabido una curiosa versión de ‘Me pongo colorada’ de Papá Levante (que ya era una canción oscura).
Negrete nació en Alicante y Benidorm le fascina. Por eso, el músico profundiza en su amor por Benidorm en una nueva edición de «Meister of the Week», la sección de JENESAISPOP patrocinada por Jägermusic en la que artistas hablan de sus intereses extramusicales. Negrete recuerda sus experiencias en Benidorm de niño, explica por qué vale la pena visitar Benidorm en invierno y recomienda su bar favorito de la ciudad.
¿Por qué has decidido hablar de Benidorm?
¡Porque me flipa!
¿De dónde viene el concepto de Benidorm actual?
Al parecer hubo un alcalde en Benidorm, durante el régimen franquista, que vio en su ciudad potencial para hacer una ciudad turística, un destino para turistas europeos. El problema es que, en la época, el bikini no era legal. Entonces, ese señor viajó en su Vespa desde Benidorm hasta Madrid para convencer a Franco de legalizar esta práctica del bikini. En la época, España se abría al comercio con Estados Unidos, así que al caudillo no le pareció mal y le dio los permisos necesarios para crear Benidorm.
Fun fact: la iglesia se opuso a toda esta explotación de la ciudad (por aquel entonces pueblo) ya que enaltecía la lujuria y la degradación del ser humano, pero como el gobierno de la dictadura dio el visto bueno, no pudieron hacer mucho para impedirlo. Lo que sí hicieron fue colocar, en lo alto de la mañana, a la izquierda del Paseo Marítimo de la playa de Poniente, una cruz de neón gigantesca para que los pecadores pudiéramos verla y arrepentirnos de nuestros pecados. ¡A día de hoy sigue en pie!
Eres de Alicante y Benidorm te queda a tiro de piedra. ¿Veraneabas allí en tu infancia? ¿Lo sigues haciendo?
Tengo recuerdos desde que soy pequeño de ir los sábados al rastro El Cisne. Me acuerdo de ver el cartel de la discoteca Penélope y de preguntarle a mis padres si esa discoteca se llamaba así por la actriz. Recuerdo ir con mis padres a conciertos en bares y concentraciones de motos y coches clásicos por la zona también desde que era un chavalín. No veraneo ahí porque ya vivía en la costa a unos pocos kilómetros de esta ciudad.
Cuando me mudé a Madrid me di cuenta de que en realidad no odiaba mi ciudad ni nada parecido. Me explico: cuando eres un adolescente de una ciudad pequeña en la cual, además, no hay mucho apoyo al arte en general, te sientes aprisionado y limitado y empiezas a asumir que el hecho de vivir de tu música propia es un sueño, y que conforme vayas envejeciendo te vas a tener que conformar con tener un curro normal y tener la música como afición. Por eso, mucha gente de comunidades sin mucho apoyo a lo artístico acabamos mudándonos a la capital. Sin embargo, ya residente en Madrid, cada vez que iba a Alicante a visitar a mis padres me sentía más conectado a mis raíces mediterráneas. Cada vez tengo más claro que mi identidad es ser mediterráneo.
¿Eres fan de Benidorm o tienes una relación de amor/odio con la ciudad?
Soy absolutamente fan es mi ciudad española FAV
¿Cómo son tus primeros recuerdos de Benidorm?
¡Pues lo dicho anteriormente! Ir al rastro El Cisne, pasear por el Paseo Marítimo de la ciudad, ir a conciertos de amigos de mis padres o de mi padre por pubs de la zona, ir a Terra Mítica, Terra Natura y Aqualandia, ver carteles de shows de cabaret en el Benidorm Palace… y flipar con la isla de Benidorm y con sus leyendas, como la que dice que la piedra que le falta al Puig Campana es la propia isla. De hecho, quizá ese fuera de los primeros “misterios» que suscitaron mi interés por el mundo de lo oculto y lo paranormal.
«Todo Alicante tiene un halo de misterio bastante palpable, como si estuvieras en ‘Twin Peaks’ a la española»
El eslogan «Benidorm, ciudad de vacaciones» es cultura española. ¿Conoces Benidorm en otras épocas del año, por ejemplo en invierno?
Sí, voy intermitentemente durante todo el año ya que está al lado de la casa de mis padres. Tengo un recuerdo súper fuerte de Benidorm. Un día, poco después del confinamiento, en 2020, quedé con mi amigo Rodrigo y fuimos con su padre a cenar a una pizzería en Benidorm. Hacía un año y pico que no iba por la ciudad, y coincidió con toda la reforma que le estaban haciendo: la hicieron más peatonal y la llenaron de unos halos de luz rarísimos y unas pantallas LED gigantescas. Esa imagen de la ciudad me impactó mucho y me hizo ver, por primera vez, que Benidorm es una especie de ciudad cyberpunk o, al menos, una ciudad en la que un futuro distópico cyberpunk sería increíble de ver. Aparte del impacto de todo este cambio, no había ni una sola persona por la calle, cosa que te hacía sentir de verdad en una sociedad de una novela distópica.
Aparte de esta anécdota, en Benidorm suele haber turismo todo el año. El año pasado se viralizó un vídeo de una mujer británica que estaba desnuda en el paseo celebrando el año nuevo.
¿Cuál es la percepción de Benidorm por parte de sus locales, o de la sociedad valenciana en general?
Mis amigos de Benidorm, que tienen mi edad, suelen irse de la ciudad y de otros sitios de Alicante, pero no creo que sea únicamente un fenómeno de esta ciudad en concreto, simplemente la gente se muda para avanzar con su educación u oficio. A la gente que nació allí, de mi edad, les encanta su ciudad, al menos a la que yo conozco. También tengo la sensación de que la valoran más todavía al haberse ido, como me pasó a mí.
A la gente de Alicante (comarca) a veces se nos olvida que Benidorm es una cosa que existe y que tenemos muy cerca, a pocos kilómetros. No hay tanta gente de la zona del centro de Alicante que salga por Benidorm, a pesar de que está relativamente cerca, a una media hora en coche. Creo que es tan increíble que un sitio así esté tan cerca que la gente de alrededores no termina de computarlo.
Pasa también con destinos naturales increíbles como la laguna rosa de Orihuela o las dunas de Santa Pola. Sin embargo, otras ciudades como Altea, Javea o Moraira sí son muy visitadas por gente de los alrededores.
«En los bares de Benidorm hay mucha xenofobia hacia los españoles por parte de británicos»
Para ti, ¿qué diferencia Benidorm actualmente de otros destinos turísticos parecidos?
Ninguna de las otras pocas ciudades que ofrecen esta clase de turismo y paisajes impactan tanto a la vista como Benidorm: me flipa el concepto de una ciudad con arquitectura brutalista y sesentera pero de colorines mezclada con edificios ultra modernos y barrios con casitas antiguas. Además, todo Alicante tiene un halo de misterio bastante palpable, como si estuvieras en ‘Twin Peaks‘ a la española o algo así. Prueba de ello (si no has podido vivirlo tú mismo) es un estudio que salió hace unos años en el que se decía que Alicante es el sitio de España con más sectas peligrosas de todo el territorio nacional.
¿Estás de acuerdo con la afirmación de que Benidorm se ha convertido en una especie de «parque temático» para turistas?
Claro.
Como en otros casos, la presencia de hoteles y rascacielos en Benidorm tiene cosas buenas y cosas malas. ¿Cuál es tu opinión? ¿Crees que la masificación turística ha ido demasiado lejos?
Pasa con muchos sitios de ciudades costeras mediterráneas, también pasa en parte de Galicia, aunque el turismo allí es más nacional. En el caso concreto de Benidorm, el turismo lleva tantos años siendo de la manera en la que es que nadie debate sobre si está bien o está mal que la ciudad se explote en la manera en la que se explota. Tampoco se plantea por el hecho de que toda la ciudad fue en realidad diseñada por y para el turismo. A mí personalmente me da pena que se derrumben edificios históricos de la zona que me encantan para construir rascacielos y hoteles.
Las playas de Benidorm más populares son Levante, Poniente y Mal Pas. ¿Prefieres alguna en concreto? ¿No te gusta la playa?
Prefiero las calas. Si te soy sincero creo que nunca he ido a una playa de Benidorm, a Benidorm voy a flipar con la ciudad, porque me pone súper contento ir. Fui alguna vez al Racó del Conill, que está al final de Vilajoiosa, casi en Benidorm. Es lo más cercano que he estado de bañarme en Benidorm.
«Me da pena que se derrumben edificios históricos de la zona para construir rascacielos y hoteles»
¿Cómo valoras la vida nocturna de Benidorm?
Chulísima, aunque es cierto que hay que estar avispado a veces para que no te roben, al menos no muy borracho. Ah, y hay bares en los cuales hay mucha xenofobia hacia los españoles por parte de británicos, bares en los cuales si eres español tienes que hacer una cola inexistente: la cola es que el portero te deje entrar cuando a él le apetezca mientras ves pasar a decenas de turistas ingleses dentro. Pero bueno, a mí personalmente no me molesta, si no quieres ir a ese garito no vas y ya está.
¿Qué bares de Benidorm recomiendas para ir de noche?
Me gusta mucho el Café Benidorm, en la Avenida Mallorca. Tengo un buen recuerdo de él. Recuerdo estar con mi amigo Mitch por Benidorm de fiesta y avisar a un colega que vive ahí que nos llevó a este sitio. Desde entonces cada vez que salgo por ahí suelo ir. Hay un DJ increíble que suele pinchar disco y en el aseo te encuentras con un señor que te ofrece un montón de cosas como perfumes y un largo etcétera de cosas loquísimas. Además, por dentro es entero de madera y hay una pista de baile. Es un sitio que lleva abierto muchísimos años y ha mantenido casi toda la decoración original.
¿Crees que Benidorm debería, como destino turístico, mejorar en algún aspecto?
Creo que lleva muchos años siendo como es y que todos hemos aceptado la clase de turismo que atrae esta ciudad.