De todos los festivales veraniegos que incluyen la palabra “pop” en su nombre, quizá el Lemon Pop sea el que más fiel es a lo que promete. La edición de este año, la decimoquinta, presentaba un cartel lleno de bandas de renombre que, sumado a que la entrada es libre, atrajo a cientos de personas al festival. Es una pena que, una vez hecho lo más complicado, el mayor reproche que se le pueda hacer a la organización sea la desinformación en cuanto a los horarios. En todo el recinto no había ni un programa de mano, ni un cartel, ni prácticamente nadie que supiera a ciencia cierta cuándo tocaba cada grupo, lo que hizo que hubiera gente que se perdiera cosas interesantes.
Viernes:
Single: Tal vez por el desconcierto con los horarios, el público del concierto de Single era mucho menos numeroso de lo que debería haber sido, sobre todo teniendo en cuenta que estrenaban en Murcia su nuevo disco, ‘Monólogo interior‘, que se puso a la venta, precisamente, el viernes en el festival. Abrieron con una canción de Lucía Bosé que sería la primera de las tres versiones que escucharíamos (después sonarían ‘Gracias a la vida’ de Violeta Parra y ‘Vamos a casarnos’ de Hidrogenesse). A través de los temas de su primer disco (‘Honey’, ‘Señor invierno’ y la divertidísima ‘Perrito librepensador’) fueron introduciendo al público en su particular universo. Junto a estos temas, ya conocidos, estrenaron ‘¡Miau!’, ‘Fotos’ y, la canción elegida para su primer vídeo, ‘Posponías‘ . ‘Mr Shoji’, uno de los mejores temas nacionales de 2009, puso el punto final al concierto.
Klaus & Kinski: Klaus & Kinski empezaron con retraso porque, según comentó Marina, el tren que tenía que llevar a Paco -uno de los músicos- a Murcia tardó más de la cuenta en llegar y tuvieron que empezar con otro bajista. Se mostraron, puede que por ello o a lo mejor por las ganas de hacerlo bien en casa, algo más nerviosos de lo habitual. Arrancaron con ‘El Cristo del Perdón’ (la única canción de ‘Tu hoguera está ardiendo‘ que sonó) y repasaron después algunas canciones de ‘Tierra Trágalos‘ (‘Mamá no quiero ir al colegio’, ‘Brilla como una estrella’, ‘El rey de mambo y la reina de Saba’, entre otras). El sonido fue perfeccionándose a lo largo de su actuación y certificaron que sus directos son cada vez mejores.
Lucky Soul: Curiosamente, al igual que en la edición de 2007, Lucky Soul salían al escenario después de Klaus & Kinski. Si en aquella ocasión no eran más que una promesa, volvían ahora como banda consagrada tras dos discos excelentes. Ali Howard hizo gala de su fuerza y magnetismo sobre el escenario al interpretar sus éxitos ‘Ain’t Never Been Cool’, ‘One Kiss Don’t Make A Summer’ o ‘White Russian Doll’. Se echó en falta, eso sí, ‘Lips Are Unhappy‘ con su “shake shimmy shimmy”.
The Pepper Pots: La vieja escuela del soul cerraba la noche del viernes con la banda más numerosa de todo el festival. Diez personas sobre el escenario incluyendo al fantástico trío de vocalistas (que sorprendieron con chica nueva a las voces) transportaron al público a mediados de la década de los swinging sixties en un abrir y cerrar de ojos. Coros exquisitos que iban entrelazándose con la voz principal (a turnos entre las tres) hicieron que sonaran perfectas sobre todo canciones de su último trabajo ‘Now!‘ como ‘Dream Guy’, ‘A Real True Love’, ‘Time To Live’, ‘You’re Still in My Mind’, ‘Your Girl’ o la enérgica ‘Take A Chance’. Y para alegría de algunos no faltó la genial ‘I Can Feel It’ de su segundo álbum, ‘Shake It‘. Sin duda alguna, la banda merece un sobresaliente a su estilismo en general y en especial al de las chicas que, unido a sus estudiadas coreografías, hace del espectáculo de The Pepper Pots uno de los más disfrutables para los amantes del género.
Sábado:
Los Ginkas: Hace meses que Ginkas vienen pisando fuerte y su directo en el Lemon no hizo más que corroborar que son una de las “nuevas bandas” más a tener en cuenta. Ofrecieron un concierto de esos que hacen fans, impecable y divertidísimo, donde no faltaron colaboraciones de amigos como la de Alfonso (de Hello Cuca) o Amaia (Kokoshca, Reina Republicana). Esta última acompañó a Maier y Edurne en el hit del grupo “Fiesta en la luna”. Fabulosos.
The School: La banda de Cardiff era una de las más esperadas de la noche. Su líder, Liz Hunt, se mostró muy contenta de tocar en el Lemon (hizo, incluso, una foto al público desde el escenario) y, entre canción y canción, dio muestras de una timidez que no se vislumbra, en absoluto, cuando está interpretando ‘Let It Slip’, ‘All I Wanna Do’ o ‘Loveless Unbeliever’.
Súper Cola Jet Set: Los barceloneses demostraron que el “Súper” añadido a su nombre por el aumento de la formación está más que justificado. Con su, ya característicos, vestuario en rojo, blanco y azul, coreografías y sonrisa perenne hicieron un repaso a los éxitos de sus dos discos, como ‘Cosas que nunca se olvidan’, ‘En esta pista ya no se puede bailar’ o ‘Suena el teléfono’ y anticiparon una nueva canción que, a buen seguro, se convertirá en un éxito, ‘Sábado’. El cierre del concierto con ‘Quiéreme’ y ‘Al Amanecer’ hizo bailar hasta al más reacio.
Fanfarlo: La formación de Simon Balthazar, como ya nos hizo ver el pasado Día de la Música en Madrid, no defraudó a casi nadie con su pop poderoso y envolvente. La multi-instrumentista Cathy Lucas parece hacerlo todo bien, ya le dé al violín, a los teclados, a la guitarra, a la melódica, a la percusión o a las voces, que conjugan perfectamente con las de Simon resultando en unas armonías de inmejorable acabado. Las emocionantes ‘Finish Line’, ‘The Walls Are Coming Down’ o ‘Ghosts’ junto con los ya imprescindibles hits ‘I’m a Pilot’ o ‘Fire Escape’ o la cara B ‘We Live By The Lake‘ prueban la solidez de la banda despuntando como uno de los mejores directos del festival. Angèle, Tang de Naranja.